Bono hizo esta consideración en respuesta a una interpelación del coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, que reclamó que la desafección del suelo de Defensa tenga como objetivo la construcción de vivienda social y que se acabe con la "especulación escandalosa" del Gobierno anterior.

Operación Campamento

El titular de Defensa, quien citó subidas de hasta el 150 por ciento entre la tasación y la venta de algunos terrenos en la etapa anterior, se refirió a las críticas que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha hecho sobre los acuerdos que ella misma firmó con el Ministerio en relación con la denominada "Operación Campamento" en Madrid.

Bono acusó a la presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, de ser "de las que besa a mediodía y muerde por la noche, de una manera que no es acorde con su aristocrática posición".

El ministro exhibió un documento suscrito en julio de 2001 entre Defensa y la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en el que se establece que las plusvalías de las ventas de esos terrenos irían destinadas a comprarle explosivos a la empresa Santa Bárbara, que iba a ser privatizada por entonces.

"Este era el caramelo que llevaba la privatización", insistió Bono, quien leyó alguno de los términos de ese acuerdo como el referido a que el Ministerio de Defensa "se obligará, con cargo a los importes procedentes de estas enajenaciones, a formular pedidos de material a la Empresa Nacional Santa Bárbara".

Además, indicó que, desde su llegada al departamento, se han hecho veintidós operaciones de este tipo y en ninguna de ellas, salvo en un caso en Baleares, se ha utilizado el sistema de subasta pública sino convenios con ayuntamientos y Comunidades Autónomas, con lo que se garantiza que el receptor de los terrenos tiene una finalidad social que cumplir.