La Quinta sinfonía de Ludwig van Beethoven, compuesta a principios del siglo XIX, ha conseguido desbancar al Mesías de Haendel como la obra musical más interpretada en el mundo, según datos de la consultora Bachtrack.

La empresa también destaca en sus estadísticas anuales que la ópera más representada en 2015 es La Traviata, de Verdi. Bachtrack contrasta datos sobre musica clásica en el último año, como las tres orquestas que han dado más conciertos (la Chicago Symphony Orchestra, la New York Philharmonic y la San Francisco Symphony).

Los directores más demandados han sido Jonathan McPhee y Simon Rattle. En cuarta posición se sitúa el venezolano Gustavo Dudamel, que será el encargado de dirigir el próximo Concierto de Año Nuevo en Viena.

España entra en las estadísticas como uno de los países que más música contemporánea programa, el tercero detrás de Suecia y Estados Unidos. La ONE (Orquesta Nacional de España) es, de las orquestas españolas, la que más conciertos ofreció (un total de 91), y ocupa el puesto 12 en la lista mundial.