La Consejería de Sanidad ha aceptado completar la reconstrucción facial, con la colocación de implantes dentales, a un paciente que padece una enfermedad rara, en concreto Lesión de Nora, después de que tal intervención fuera demandada por el Procurador del Común, Javier Amoedo.

El paciente fue intervenido de un tumor que afecta al hueso de la mandíbula en su cara lingual, cuya cirugía consiste en extirpar la zona afectada con márgenes de seguridad (mucosa, huesos, dientes, huesos maxilares) para eliminar el tumor.

Tras la operación, se le denegó la implantación de las piezas dentales, basándose la Consejería del ramo en que dicho servicio no estaba financiado por el Sistema Nacional de Salud.

Admitida la queja del paciente a trámite e iniciada la investigación oportuna, se comprobó que había resoluciones judiciales en otras comunidades en las que se fallaba que la implantación de las prótesis tenía como finalidad corregir los efectos nocivos para su salud y que por tanto debían formar parte de la intervención.

Se consideraba que no tenía una finalidad estética, sino la recuperación de la función de masticación que se había perdido por efecto del tratamiento.

El Procurador del Común, tal y como advierte a través de un comunicado recogido por Europa Press, considera que la asistencia sanitaria debe entenderse como un concepto integral y aunque algunas decisiones se puedan amparar en las disponibilidades económicas o financieras eso no quiere decir que haya que trazarse límites absolutos sino que se debe atender a las circunstancias concurrentes.

Por eso, instó a la Consejería de Sanidad a dar las instrucciones oportunas para que se proceda a autorizar la colocación de los implantes dentarios como parte de la asistencia sanitaria y así concluir una restauración facial íntegra, petición que ha sido estimado por el departamento de Antonio María Sáez Aguado.