La línea 31 solamente circula durante los meses de verano, de junio a finales de septiembre. Es hora punta para bajar a la playa, pero, aun así, el vehículo no va muy lleno.

Se trata de una línea muy puntual, pues en su recorrido sólo hay dos puntos conflictivos de tráfico: la avenida de Niza y el cruce con la  de Dénia (rotonda de Porcelanosa).

El chófer asegura que ésta es una buena línea, tranquila y sin sobresaltos. Sin embargo, también tiene de qué quejarse. Los pasajeros están contentos, pero piden que el servicio se prolongue todo el año, para que los vecinos de Sant Joan y Mutxamel puedan llegar a la playa en transporte público.

Al igual que otros conductores, el chófer de esta línea se queja de que no tienen dónde ir al baño en la avenida de Irlanda y que en Mutxamel están obligados a ir a un bar, con lo que tienen que consumir para poder entrar al retrete. Nuestra nota: 7.

Melisa Peralta Tiene 22 años.

«Subo habitualmente a este autobús y creo que tarda bastante. En mi opinión, tendría que pasar por lo menos cada media hora, pues para llegar desde aquí hasta Sant Joan no hay mucho servicio. Tendría que demorarse menos, aunque es una línea bastante puntual.»

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