La bolsa española ha caído este miércoles el 2,44 %, la mayor bajada desde que Grecia adoptó el "corralito" financiero a finales de junio, por la decisión de las autoridades chinas de devaluar por segunda vez el tipo de cambio de su moneda, el yuan, respecto al dólar, según fuentes consultadas y datos del mercado.

El Banco Popular de China volvió a rebajar este miércoles otro 1,62% el tipo de cambio de referencia del yuan con respecto al dólar, tras anunciar el martes una reforma en el sistema cambiario que ya implicó una devaluación de casi un 2%.

Mientras la prima de riesgo subía a 135 puntos básicos (ayer cerró en 130), el principal indicador del mercado nacional, el IBEX 35, cedió 272,20 puntos, el 2,44%, el mayor descenso desde el 29 de junio pasado, hasta 10.880,10 puntos (nivel desconocido desde el 9 de julio).

Todos los grandes valores bajaron: Inditex perdió el 4,21%; Banco Santander, el 2,81%; BBVA, el 2,64%; Telefónica, el 2,25%; Repsol, el 1,37%, e Iberdrola, el 1,27%.

El Ibex se ha anotado así su segunda jornada negativa en la semana, las dos motivadas por los movimientos de China. El selectivo ha perdido casi un 4% en las sesiones de este martes y miércoles.

Pese al fuerte retroceso, el selectivo madrileño ha contenido las caídas extendidas entre las principales plazas de Europa tras la decisión de China. París, Milán y Francfort han caído alrededor de un 3%, en tanto que Londres ha minimizado su descenso al 1,6%.

La inestabilidad en las bolsas se ha trasladado también al mercado de deuda pública, puesto que la prima de riesgo española subía a los 135 puntos básicos desde los 130 puntos que marcaba en el inicio de jornada.

Sin embargo, el euro continuaba reforzando posiciones respecto al dólar y la moneda única europea se intercambiaba por 1,1203 unidades al cierre de sesión.

Wall Street abrió este miércoles otra vez con fuertes pérdidas y el Dow Jones, su principal indicador, caía un 1,13 %, arrastrado por el pesimismo en los mercados financieros tras la nueva devaluación del yuan en China. Sin embargo, el parqué estadounidense logró enjugar al cierre las fuertes pérdidas que había acumulado: el Dow Jones terminó el día sin casi variación porcentual (-0,33 puntos), el S&P 500 avanzó un 0,10% y el Nasdaq progresó un 0,15%.