Euskadi cerró el primer semestre de 2015 con 141 empresas más que en el mismo periodo de 2014, lo que supone "el mejor primer semestre desde el año 2007", según recoge el informe sobre la evolución del tejido empresarial en la Comunidad Autónoma Vasca elaborado por Confebask.

Según los datos ofrecidos por la patronal vasca, el número de empresas inscritas en la Seguridad Social en el País Vasco se redujo en junio en 396, "un mal dato, que no evita que, en términos interanuales se hayan creado 619 empresas, un 1,1% más que en junio de 2014, sumando un total de 58.203 empresas".

El primer semestre se cerró con 141 empresas más que al cierre de 2014, una cifra igual que en el primer semestre de 2014 y que supone "el mejor primer semestre desde el año 2007".

El número de empresas disminuyó en junio en los tres territorios, aunque con algo más de intensidad en Álava y menos en Gipuzkoa. En términos interanuales, aumentó el número de empresas en los tres territorios, con una intensidad algo mayor en Bizkaia (1,2%) y menor en Gipuzkoa (1,0%).

El número de autónomos aumentó en junio en 264 personas, "el mejor dato en un mes de junio desde 2006", y el aumento interanual del número de autónomos se sitúa en 991 personas, un 0,6% más que en junio de 2014. Desde que se inició la crisis, todavía se acumula, no obstante, una pérdida de 15.093 autónomos (-8%).

El primer semestre finalizó con 564 autónomos más, cifra similar a la alcanzada en la primera mitad de 2014, y supone "el mejor primer semestre desde 2008". El número de empresas en procedimiento concursal se redujo en el primer trimestre un 28,7% respecto al primer trimestre de 2014, afectando a 97 empresas, frente a las 136 de los tres primeros meses de 2014.

Por sectores, destaca el fuerte descenso de los concursos en industria (-67,6%), y construcción (-32,1%), con una reducción más moderada en servicios (-4,3%).

"modesta recuperación"

Confebask ha señalado que junio "no fue un mes positivo para la creación de empresas, y sí en cuanto al número de autónomos, si bien ambas variables registran crecimientos interanuales, marcando una progresiva, aunque modesta, recuperación".

A su vez, ha indicado que "el número de empresas concursadas sigue reduciéndose con fuerza, pero todavía supera a los niveles previos a la crisis".

Por otro lado, ha considerado que "la intensificación de la actividad económica debe ir traduciéndose en términos de creación de nuevas empresas y en la generación de empleo".

Para ello, ha afirmado, es "imprescindible alinear las estrategias empresariales y los planes públicos de actuación en la dirección del crecimiento y la competitividad, afrontando adecuadamente los retos que se plantean en áreas clave como el tamaño empresarial, la internacionalización, la formación o la I+D+i".