La cifra de mujeres gallegas víctimas de violencia de género con órdenes de protección activas durante 2014 disminuyó un 3 por ciento con respecto al año anterior, hasta las 1.215 personas, lo que supone un 11,2 por ciento menos que las mujeres protegidas en la Comunidad en el año 2011.

Así lo evidencian los datos hechos públicos este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), según los cuales 27.087 mujeres españolas víctimas de violencia de género contaron con algún tipo de protección durante 2014, un 0,1 por ciento menos que el año anterior.

Las víctimas protegidas en Galicia por este tipo de violencia son mayoritariamente españolas, de mediana edad y mantenían en el momento de la denuncia una relación sentimental con su agresor.

En concreto, según los datos del INE, el 57,8 por ciento de las víctimas protegidas en Galicia el pasado año tenía entre 25 y 44 años, mientras que el 24,8 por ciento estaban entre los 45 y los 64 años y el 12,3 por ciento entre los 18 y los 24 años. Un total de 47 mujeres de más de 64 años contaron con medidas de protección por violencia de género en 2014, así como 15 niñas menores de edad.

Según su nacionalidad, el 77 por ciento eran españolas. Entre las extranjeras, el 5,8 por ciento provenían del resto de Europa, el 15,4 por ciento de América y el 1,5 por ciento de África. Dos de las mujeres protegidas tenían origen asiático.

Aún con relación

El 63 por ciento de las víctimas de violencia de género protegidas en Galicia aún mantenía una relación sentimental con su agresor en el momento de la denuncia. Concretamente, 350 mujeres estaban casadas con el denunciado, 142 eran su novia y 274 su pareja de hecho.

Por otra parte, el 34 por ciento ya habían cortado con anterioridad esta relación y 26 mujeres estaban en proceso de separación.

DENUNCIADOS

En cuanto a los denunciados, el 54 por ciento tenía entre 25 y 44 años, el 31,5 por ciento entre 45 y 64 y el 8,9 por ciento entre 18 y 24 años. Un total de 65 denunciados tenía más de 64 años y tres eran menores.

Entre las infracciones penales más atribuidas a los agresores estuvieron la lesiones —810 casos—, las torturas y agresiones contra la integridad moral —205 casos—, las amenazas —176 casos— y las coacciones —55 casos—.

Los juzgados dictaron en estos casos 700 medidas cautelares civiles, entre las que se encuentran uso de vivienda familiar, régimen de visitas a los hijos o pensiones. A mayores, se dictaron 2.733 medidas cautelares penales, entre ellas prohibición de aproximarse —948—, prohibición de comunicarse —898—, libertad provisional —505—, obligación de comparecer —155— o prisión provisional —53—.