La Policía Local de Málaga sorprendió el pasado domingo 14 de marzo, coincidiendo con la disputa del partido de fútbol en el estadio de La Rosaleda entre el equipo local y el Córdoba, a un grupo de nueve menores, de entre 10 y 15 años, causando daños en diversos vehículos que estaban aparcados.

Del total, cuatro tienen entre 10 y 13 años, siendo por tanto inimputables; y cinco cuenta con entre 14 y 15 años, siendo detenidos como presuntos autores de un delito de robo en el interior de los vehículos, según ha informado la Policía Local en un comunicado.

Los hechos tuvieron lugar sobre las 17.45 horas. En un primer momento, dos agentes que suelen prestar servicio en la Jefatura de Policía de Barrio Distrito Churriana-Aeropuerto, que se encontraban en ese momento en la avenida La Palmilla con calle Arlanza realizando labores de regulación del tráfico con motivo del dispositivo montado por el partido, sorprendieron 'in fraganti' al grupo de menores merodeando un coche en una zona de estacionamiento aledaña al Puente del Mediterráneo.

Así, observaron cómo varios de ellos salían del interior de un coche que tenía las puertas delantera y trasera izquierda abiertas. Tras percatarse de la presencia policial, al verse sorprendidos, todos comenzaron a huir corriendo en distintas direcciones.

Cuatro se dirigieron hacia el río Guadalmedina, dos hacia el instituto Guadalmedina, llegando a saltar al interior del patio del mismo, y otros tres lo hicieron hacia el Puente del Mediterráneo escondiéndose entre los vehículos estacionados.

Los policías locales dieron aviso de los hechos a través de la emisora al resto de unidades, facilitando la descripción de los menores, a la vez que lograban interceptar tanto a los dos que habían saltado la valla del instituto, como a los tres que pretendían ocultarse entre los coches.

Cuatro coches forzados

Los agentes comprobaron que había hasta cuatro turismos con signos de haber sido forzados, tales como cristales de puertas fracturados o dañados, espejos retrovisores rotos o interior y maletero revueltos.

Además, los policías locales localizaron por la zona un reloj, dos gafas de sol, una bolsa con ropa y la llave de uno de los vehículos forzados, efectos que serían entregados con posterioridad a sus respectivos propietarios.

Cuatro de los menores interceptados tienen entre 10 y 13 años, siendo inimputables, lo que motivó que fuesen trasladados por una unidad de apoyo a dependencias policiales con el fin de localizar a sus progenitores y hacerles entregas de los mismos, ya que se encontraban indocumentados. En cuanto al quinto, de 15 años, fue detenido.

Mientras esto ocurría, dotaciones del Grupo Operativo de Apoyo (GOA) y del Grupo de Investigación y Protección (GIP) de la Policía Local de Málaga realizaban una batida por la zona a la búsqueda de los cuatro implicados restantes, que fueron localizados en el cauce del río Guadalmedina, volviendo a huir rápidamente tras percatarse de la presencia policial.

Tras ser perseguidos por distintas calles, dos de ellos fueron interceptados y detenidos, uno en calle Francisco Cárter y otro en la última planta de un edificio sito en calle Concejal Eduardo Heredia, terminando también por entregarse un tercero.

En cuanto al cuarto implicado, las pesquisas policiales llevaron a los agentes a averiguar su identidad, contactándose con su madre, que se personó posteriormente con el mismo en dependencias del GIP de la Policía Local de Málaga.

Estos cuatro menores fueron detenidos, siendo, por tanto, cinco el número de detenidos final, los cuales, tras ser informada la Fiscalía de Menores de los hechos, fueron puestos en libertad y entregados a sus respectivas madres, siendo informadas de la obligación que tenían de comparecer ante dicho organismo cuando fuesen requeridas para ello.

Asimismo, los policías locales rastrearon la zona del río donde se encontraban los menores. Localizaron y recuperaron otros efectos sustraídos, entre ellos un teléfono móvil y una tableta, artículo este último que los menores habían enterrado para dificultar su localización.

Por otro lado, los policías locales llevaron a cabo las gestiones oportunas para contactar con la propiedad de los vehículos violentados, siendo informados para que se personaran en dependencias del GIP a fin de ser oídos en declaración, haciéndoseles entrega de los objetos recurados que reconocían como propios, si bien quedaron sin ser reconocidas algunas prendas de ropa que fueron remitidas al Depósito de Efectos y Piezas de Convicción.

A pesar de su corta edad, tres de los menores implicados tienen antecedentes y reseñas en la Policía Local de Málaga por delitos de hurto en interior de establecimiento o en vehículo.