Dos de los cuatro últimos detenidos en la operación Malaya salieron ayer en libertad con el cargo de blanqueo de capitales tras declarar ante el juez Miguel Ángel Torres: la hija de Juan Antonio Roca, María, y la supuesta empleada encargada de buscar personas con décimos de lotería premiados, Karen, M. M. En cambio, para la mujer del ex asesor de Urbanismo, Rosa Jimeno, y su hermano, Antonio, el juez dictó una fianza de 90.000 y 60.000 euros, respectivamente, que al cierre de esta edición aún no habían sido abonados.La hija afirmó desconocer una cuenta bancaria con sus datos personales y negó que le hubiera tocado la lotería. Por su parte, Karen M. M. se desmarcó de los citados décimos de lotería y del dinero depositado en un banco de Murcia.