ETA vuelve al juicio del 11-M

  • Un experto policial aseguró en la sesión de la mañana que no había señales de ETA en la furgoneta Kangoo.
  • Por la tarde, un ex confidente de la UCIE, ha asegurado que informó de las conexiones de algunos islamistas con ETA.
  • Sigue el juicio del 11-M en el especial de 20minutos.es

Si en la sesión de la mañana del miércoles un experto en ETA aseguraba que no vio indicio alguno de la banda terrorista en la furgoneta Kangoo, un confidente de la Policía declaraba que oyó a dos presuntos terroristas islamistas hablar sobre la posible relación con ETA.

De nuevo, ETA entraba en la sala a las preguntas de la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M.

Un experto en ETA no vio indicios

Durante la sesión de la mañana, el agente identificado con el número 79.858 y especialista en la lucha contra ETA, ha asegurado que en la Renault Kangoo no había rastro de ETA. El agente que inspeccionó la furgoneta el mismo día 11 de marzo ha asegurado que las cerraduras no estaban forzadas, el vehículo portaba sus matrículas originales y que en el interior no había ninguna carga explosivo.

"No habían explosionado el vehículo para eliminar huellas", ha asegurado el testigo, lo que le hizo descartar a ETA, ya que "no era su Modus Operandi".

Además, el agente 79.858 ha asegurado que tomó declaración al portero de la finca cercana, quien describió a las personas como demasiado abrigadas, con una mochila cada uno.

Un ex confidente de la Policía se desdice de declaraciones anteriores

En la sesión de la tarde, ha comparecido 'El Cartegena', un testigo que trabajó como confidente de la UCIE . Según ha declarado el testigo protegido fue obligado por la Policía a ser confidente, desdiciéndose de sus declaraciones anteriores.

Como en sesiones anteriores, el abogado de la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M ha preguntado sobre si había comunicado la relación entre ETA y los terroristas islamistas.

El confidente ha asegurado que fueron los propios agentes de la UCIE los que le obligaron a que no dijera nada sobre las relaciones entre ETA y los terroristas islamistas.

El testigo protegido ha asegurado que la primera referncia que tuvo de ETA fue en una conversación entre Barraj y "un señor al que llamaban Mustafa El Rifi" sobre la ayuda que le podían proporcionar "los infieles" : "Si ETA nos va a vender los explosivos, van a estar muy contentos porque van a ganar dinero, y nos pueden señalar el objetivo, algún lugar oficial".

A las preguntas de la misma acusación, el confidente ha asegurado que Mohamed Achraf le contó como había estado en contacto en la carcel con el etarra Rego Vidal: "Coincidió en la cárcel con él y hablaron y se dijeron la ideología y los partidos políticos que tenía preferencia. Me dijo que le facilitó números de teléfono, que si necesitaba ayuda - no sé que tipo de ayuda - se la iba a dar, porque el iba a estar mucho tiempo en la cárcel".

"¿Cuándo le tenemos que creer, ahora o antes?", le ha preguntado otra acusación. El testigo, después de contestar que lo que estaba declarando era verdad, ha añadido "que no todo lo que conté es mentira", remitiéndose a una declaración escrita que envió al tribunal presidido por el juez Gómez Bermúdez.

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