El Sindicato de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Málaga ha criticado que la provincia malagueña es la que registra, en Andalucía, el número más elevado de agresiones a profesionales sanitarios.

Así, según el sindicato, la provincia malagueña se sitúa, con un total de 1.244 agresiones, en cabeza a nivel andaluz al compararse el volumen de trabajadores con el número de agresiones registradas.

Las urgencias y los servicios de salud mental de los hospitales de la capital malagueña, junto con los centros de atención primaria ubicados en la Costa del Sol, son los principales lugares donde se registra, en el periodo 2007-2012, el mayor número de agresiones a profesionales sanitarios.

Estas son las conclusiones del estudio hecho público este jueves por el Sindicato de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Málaga con motivo del Día Mundial contra las Agresiones al Personal del Sistema Sanitario.

Al compararse el número de agresiones registradas — 1.244— con la totalidad de profesionales sanitarios trabajando, que suman 15.581 personas, Málaga se sitúa como la provincia andaluza con el mayor número de agresiones, un 7,98 por ciento, frente a la media andaluza que ha sido un 6,02 por ciento.

Así lo ha expuesto este jueves en rueda de prensa el secretario general del Sindicato de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Málaga, Rafael González, tras un estudio realizado debido a la problemática que sufre desde hace años los trabajadores de este sector.

Junto a estas cifras, el líder sindical ha señalado que "además estimamos que al menos hay un 20 por ciento más de agresiones verbales que no han sido denunciadas".

González ha detallado que en 2010 hay un cambio de tendencia y es cuando empieza a crecer el número de agresiones haciéndose más intensa al año siguiente, en plena situación de crisis, y así sucesivamente.

"Desde CCOO consideramos que el inicio de los recortes emprendidos por el Gobierno del PP son consecuencias de estas agresiones, y a ello hay que añadir, además, la sobrecarga asistencial que sufre el personal sanitario malagueño, desde médico hasta celador", ha criticado el secretario general.

En este sentido, ha mostrado la preocupación del sindicato ante esta problemática y ha propuesto "la construcción de un Observatorio de Agresiones para analizar, desde el punto de vista integral de la salud laboral, los cambios organizativos en los centros de trabajo impuestos por los recortes y su incidencia en las agresiones".

Asimismo, ha recordado la importancia que tiene acometer todas las mejoras precisas desde el acuerdo de todas las partes integrantes del Plan de Atención de Agresiones al Profesional Sanitario y Sociosanitario.