El déficit del Estado creció el pasado mes de noviembre en casi 3.600 millones de euros, situándose la cifra total del desfase entre gastos e ingresos en más de 40.606 millones de euros, equivalente al 3,96% del Producto Interior Bruto (PIB), "debido fundamentalmente al incremento del gasto en intereses y a las mayores transferencias a la Seguridad Social", según un comunicado oficial del Ministerio de Hacienda.

Fuentes oficiales señalan que el déficit primario (aquel que descuenta el gasto de los intereses de la deuda) ascendía en noviembre a 14.601 millones de euros, un 1,5% por debajo del nivel registrado el año anterior.

La Administración Central del Estado había logrado hasta noviembre recaudar 89.533 millones de euros en impuestos, frente a los 62.306 millones de euros captados entre enero y noviembre de 2012. "Hay que tener en cuenta la liquidación definitiva a las CC AA de los impuestos cedidos del año 2010 —y efectuada en julio de 2012— liquidación que resultó favorable a las CC AA y, por tanto, supuso un menor ingreso del Estado en 25.098 millones", explican desde el Gobierno, que por eso justifican unos ingresos "anormalmente bajos" en 2012 procedentes del pago de impuestos.

En el lado de los gastos, aquellos cuyo origen no es financiero (debido al pago de intereses de la deuda) aumentaron en noviembre un 6,8% respecto al año anterior, debido entre otras medidas a un aumento del 24,9% de las transferencias a la Seguridad Social. Estas mayores transferencias suponen un aumento del déficit del Estado, si bien por el otro lado sirven para reducir el déficit de la propia SS.

Los datos de déficit del Estado suponen superar, a falta de un mes, el límite máximo marcado para esta administración para el conjunto del año (3,8% del PIB), y complica aún más el cumplimiento del objetivo total acordado con Bruselas (6,5% del PIB, con un 1,3% para las CC AA y un 1,4% para la Seguridad Social).

Este lunes también se han publicado los datos del déficit total correspondientes al tercer trimestre del año. El desfase negativo entre ingresos y gastos se situó en el 4,87% del PIB, lo que supone tener un colchón de unos 20.000 millones de euros para cumplir en el último trimestre del año. Precisamente para lograrlo, el Gobierno llevó a cabo en los últimos meses del año retoques que ponían más a tiro el cumplimiento del objetivo.

La Seguridad Social, por su parte, registró en noviembre un saldo positivo de 943 millones de euros. El resultado se debe en gran parte a los más de 15.000 millones de euros en transferencias por parte del Estado. Y es que el mes pasado las cotizaciones sociales volvieron a descender un mes más (un 2,78%), mientras que los pagos de prestaciones y pensiones siguieron creciendo (un 3,94%).

Hace un año, el sistema de protección público lograba un saldo positivo de 2.756 millones, y este año ha descendido a apenas un tercio, según datos de Hacienda. A esto hay que sumar que en diciembre se ha tenido que echar mano del Fondo de Reserva de las pensiones para hacer frente a las obligaciones del último mes del año.