'Fiesta' de la Constitución con solo 5 presidentes autonómicos y en pleno debate sobre su reforma

Acto de izado de la bandera presidido por los presidentes del Congreso, Jesús Posada, y del Senado, Pío García Escudero, en la Plaza de Colón de Madrid con motivo de la celebración del 35 aniversario de la Constitución.

El Congreso de los Diputados acoge este viernes el acto central de celebración del Día de la Constitución, que cumple 35 años, en pleno debate político sobre la conveniencia o no de reformarla. La celebración contará con muy pocos presidentes autonómicos: solo cinco.

Los presidentes de la Cámara baja, Jesús Posada, y del Senado, Pío García Escudero, presiden conjuntamente este acto y serán los encargados de recibir a los invitados. Hasta 1.733 invitaciones han cursado las Cortes, dirigidas al Gobierno, los parlamentarios, representantes de las altas instituciones del Estado, gobernantes y representantes políticos autonómicos y personalidades de la sociedad civil.

El acto está previsto al mediodía, pero desde las 11.40 horas Posada y García Escudero recibirán a los invitados en la entrada del Palacio de la Carrera de San Jerónimo. Después se dirigirán al salón de conferencias, más conocido como el Salón de Pasos Perdidos, en el que el presidente del Congreso dirigirá unas palabras a los asistentes.

Ausencias reseñables

Un año más, los representantes de los partidos nacionalistas en el Parlamento no acudirán a esta celebración, en un momento en el que las pretensiones soberanistas en Cataluña copan buena parte del debate político español.

Pero además, la celebración de este año contará solo con cinco presidentes autonómicos: los de Aragón, Castilla-La Mancha, la Comunidad Valenciana, Murcia y Canarias. No estarán los presidentes de Andalucía, Asturias, Baleares, Cantabria, Castilla y León, Cataluña, Extremadura, Galicia, La Rioja, Madrid, Navarra y País Vasco.

En el caso de la Izquierda Plural, ni el líder de IU, Cayo Lara, ni el portavoz de este grupo, José Luis Centella, acudirán al acto por encontrarse en Cuba en una visita para estrechar lazos con el partido comunista de ese país.

Debate sobre su reforma

Este año, el aniversario de la Constitución se produce en un momento en el que prácticamente toda la oposición reclama la reforma de la ley fundamental.

Desde el Gobierno se insiste en que para llevar a cabo cambios es necesario, al menos, un consenso previo sobre los asuntos a debatir, y disposición negociadora por todas las partes, algo que no se da en estos momentos, y ante el desafío independentista subraya que hay aspectos de la Constitución inamovibles, como el que garantiza la unidad del país y el que otorga la soberanía a todos los españoles.

En vísperas de la celebración, han sido varios los dirigentes políticos que se han pronunciado al respecto. Los actos que han tenido lugar este jueves por parte de algunos partidos, comunidades e instituciones políticas han transcurrido en medio de alabanzas al texto constitucional y de llamamientos para que se cambie.

Mariano Rajoy: el presidente del Gobierno ha señalado que la Constitución "no es un corsé" que impida moverse, sino el marco de libertades y derechos de los españoles que ha permitido la descentralización política, así como la sanidad, educación y pensiones universales. En el mensaje que ha grabado con motivo de este 35 aniversario, Rajoy aprovecha para agradecer su labor a todas las personas que hicieron posible el texto, empezando por el rey, al que califica de "su gran inspirador".
Soraya Sáenz de Santamaría: la vicepresidenta se ha referido a las "dispares y contradictorias" posiciones de los partidos para reformar la ley fundamental. "No hay dos posiciones iguales", ha considerado, y ha recalcado que "falta un núcleo de consenso que permita iniciar este proceso con garantías de que va a llegar a buen término".
Alfredo Pérez Rubalcaba: el secretario general del PSOE ha acusado al Gobierno de vulnerar "la letra y el espíritu" de la Constitución y, en algunos casos, de hacer una auténtica "contrarreforma" constitucional "en B", porque "no lo dijeron" en su programa electoral. 35 años después de aprobarse el texto, Rubalcaba ha proclamado que "hay buenas razones" para sentirse "satisfechos y orgullosos", porque ha sido la etapa democrática más larga y fecunda de España.
María Dolores de Cospedal: en sintonía con el Ejecutivo, la presidenta de Castilla-La Mancha y secretaria general del PP ha manifestado su convicción de que no es el momento de abordar una reforma: "No sabemos hacia dónde nos va a llevar y sin saber hacia dónde queremos ir". "Desde luego" no es el momento si la propuesta sólo obedece a "problemas internos" de determinadas formaciones políticas o a algunos gobiernos, ha agregado.
Ignacio González: el presidente de la Comunidad de Madrid cree que no puede ni debe reformarse para ahondar la división entre los españoles ni para "atender desafíos soberanistas" movidos por el interés "de unos pocos".
Ramón Luis Valcárcel: el presidente de Murcia ha abogado por que esté siempre "a salvo de los vaivenes políticos asociados a la alternancia en el poder".
Rosa Díez: la líder de UPyD ha incidido en que urge emprender la reforma del modelo territorial del Estado, pero no precisamente para satisfacer a los que pretenden romperlo y quieren primar "la etnia frente a la ciudadanía". Esta formación apremia a reformar el texto constitucional para lograr una democracia de "más calidad" y hacer frente a los órdagos secesionistas, como el de Cataluña.
Desde Barcelona, los líderes del PSC, PPC y Ciutadans han reivindicado la Constitución durante un acto de conmemoración de un texto que, para la delegada del Gobierno en Cataluña, Llanos de Luna, es la "máxima garantía de libertad real" frente a "cortinas de humo". El acto ha unido a Alicia Sánchez-Camacho, Albert Rivera y Pere Navarro, que ha decidido finalmente acudir a la conmemoración en la Delegación del Gobierno, gesto poco habitual en un líder del PSC.