Hace algo más de una semana, el 23 de enero, se detuvo a cuatro de los integrantes del Ayuntamiento grancanario de Mogán, entre ellos el alcalde, el popular Francisco González, y la primera teniente de alcalde, Onalia Bueno García.

Hoy se ha hecho público, según informaciones del diario El País, que la teniente alcalde podría haber utilizado prácticas de espionaje para desprestigiar a la comisaria encargada de la operación "Góngola", lo que ha sido calificado por el secretario del PSC-PSOE en Gran Canaria, José Miguel Pérez, como prácticas propias de la "mafia".

La comisaria en el punto de mira de Onalia Bueno era la misma que dirigió la investigación que desarticuló la trama corrupta de Telde y que detuvo a todo su equipo de Gobierno, en la denominada "Operación Faycán".

La teniente de alcalde, como informa el diario, intentó "enfangar a la comisaria en algún asunto económico turbio".

Según se deduce de una conversación grabada entre Onalia Bueno y su principal colaborador, Manuel de León, la teniente de alcalde encargó a este último, que investigara los movimientos bancarios de la comisaria (gracias a un contacto que tenían en la entidad) y que investigase en la notaría a través de la que la comisaria había comprado un apartamento turístico en Mogán "cualquier dato sobre dicha transacción inmobiliaria o cualquier otra cosa que hubiese efectuado".

La teniente de alcalde y su colaborador reconocieron los hechos ante el juez que instruye el caso su espionaje, que ha imputado a ambos un delito de revelación de secretos.