El portavoz adjunto del Grupo Popular en el Congreso, Rafael Hernando, ha calificado este viernes de "improcedente" la declaración de la diputada 'popular' en la Asamblea de Madrid Teresa Gómez-Limón, que resultó herida en el accidente ferroviario que tuvo lugar en Angrois el pasado 24 de julio, en la que le reprocha haberse convertido en "representante de los intereses" de Adif y Renfe en lugar de ser un representante de los ciudadanos.

"Me parece improcedente. Yo entiendo que es una persona que es una víctima, que está directamente afectada. Le he deseado su más pronta recuperación, pero no comparto su opinión", ha manifestado Hernando en una entrevista concedida a La Sexta, recogida por Europa Press.

Dicho esto, ha afirmado que él no ha señalado al exministro socialista de Fomento, José Blanco, como responsable del siniestro ferroviario. "Al señor José Blanco no lo he mencionado", ha asegurado, al tiempo que ha explicado que se ha limitado a poner "en evidencia" lo que han relatado los responsables de infraestructuras en el Congreso, que "se produjeron unos serie de cambios que afectaban al trazado".

"Yo no soy él que digo que esos cambios hayan alterado la seguridad. Quiero pensar que no", ha señalado, para después añadir que, a su juicio, es "absolutamente improcedente que haya quien piense que el responsable de la seguridad que se decidió en el pasado, en un tren que se inauguró en 2011, es el actual responsable de Adif, que lleva cuatro meses o el de Renfe, que lleva a penas año y medio o la ministra de Fomento", Ana Pastor.

Averiguar la verdad

En este sentido, Hernando ha sostenido que es "muy importante" averiguar la "verdad" sobre lo que ha ocurrido porque el sistema ferroviario español es de los más seguros y modernos del mundo y porque, por ésta razón se está exportando a otros lugares.

El diputado 'popular' ha insistido en que no va a buscar responsables ni "personales" ni "políticas", pero ha insistido en que su objetivo es que se busque la "verdad". En esta línea, ha afirmado que no va a hacer lo que —según ha asegurado— hizo el PSOE con el accidente ferroviario de 2003 en Chinchilla (Castilla-La Mancha), acusando al entonces ministro de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos.