El año 2006 será recordado en Madrid como uno de los que más ha sufrido. Polémicas, aceptadas por los vecinos, odiadas por los peatones, adoradas por los comerciantes... las ha habido de todo tipo, pero vamos a fijarnos en las que han cambiado la fisionomía de las calles madrileñas.

Durante estas últimas semanas el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz- Gallardón, ha empezado a recoger los frutos de tanta obra y ha inaugurado Fuencarral (con una gran ampliación de las aceras) la nueva plaza de Comendadoras o Arenal, convertida en una calle exclusivamente para peatones. Los viandantes también han ganado sitio en la Plaza del Ángel.

Plazas polémicas

Pero durante este año también hemos visto cómo se ha desatado la polémica por la situación de distintas plazas de Madrid.

Es el caso de Lavapiés, cuya obra ha quedado terminada y que ha quedado rematada por la sede del Centro Dramático Nacional, el nuevo teatro Valle Inclán.

El cambio más importante es el cambio de la ubicación de la salida del Metro, que se acerca a la entrada del teatro y el cierre al tráfico de toda la zona de Embajadores.

Pero si hay una plaza polémica ha sido la de Soledad Torres Acosta, más conocida como la Plaza de los Cines Luna, que sólo vio cómo mejoraba su situación cuando los vecinos reaccionaron y donde ya está en marcha una remodelación completa.

Algo similar ha ocurrido con Tirso de Molina, que estrenó nueva cara en junio. Montera se ha peatonalizado, pero los vecinos se quejan de que eso no ha reducido la prostitución, principal problema de la zona.

Fuera de cualquier problema y célebre por otros motivos ha sido la plaza Dalí, que ha recibido un premio por su diseño.

Lo que viene en el futuro

Uno de los proyectos que más expectación ha despertado es el de la remodelación completa de AZCA, con más zonas verdes y centros culturales y menos bares.

Una obra de amplio calado que sólo se podrá llevar a cabo en caso de que el actual alcalde renueve su mandato por otros cuatro años.

Además, se sigue con la peatonalización de la ciudad, con importantes modificaciones en el eje Letras- Ópera y en otras zonas de Centro.

Seguro que 2007 va a ser un año lleno de inauguraciones, con las elecciones tan a la vista. Habrá que ver cómo está la ciudad a estas alturas, pero ya en 2008.