Para conseguir este objetivo, los particulares tendrán que poner de su parte. Los habitantes de estos municipios contarán con la obligación de mantener ordenadas y limpias las fajas de protección que rodean a los núcleos rurales, según el Decreto aprobado en junio de 2006.

El fin de la Xunta es conseguir que el 30 de mayo estén limpios los montes, para que en el momento de máximo riesgo de incendios, una parte de Galicia se encuentre a salvo, de forma que el fuego no atente contra la seguridad ciudadana.

El volumen de trabajo asciende a una media de limpieza de 10 núcleos en 191 municipios. De ellos, 61 serán pueblos de Ourense, 54 de A Coruña, 42 de Pontevedra y 34 de Lugo.

La Xunta recuerda que no se trata de una lista cerrada, por lo que podrían incluirse nuevas localidades e incrementarse el presupuesto destinado a estas tareas de prevención.

Piden consenso contra el fuego

Consenso es lo que el PPdeG pide a la Xunta para la aprobación de una ley de incendios. En su opinión se debe mantener «todo lo bueno del anterior dispositivo» y «consensuar el resto». Como ejemplo de la falta de acuerdo se ha citado la tasa por extinción de incendios, la entrada en terrenos privados y la rebaja de las multas. El portavoz popular de Medio Rural critica que muchas de las medidas recogidas en la futura legislación gallega hayan sido tomadas de otras comunidades.