¿Estrés en vacaciones? Lo mejor es planificar las vacaciones, practicar aficiones y comunicarse

  • El fin de las rutinas habituales pueden generar angustia, ansiedad y estrés.
  • El llamado estrés estacional suele manifestarse como irritabilidad, inquietud o dificultades en las relaciones familiares y sociales.
  • Los desencadenantes pueden ser organizar las vacaciones, cambiar el lugar de residencia, estar en destinos desconocidos y la dependencia del trabajo.
Las vacaciones pueden ser estresantes.
Las vacaciones pueden ser estresantes.
EFE
Las vacaciones pueden ser estresantes.

Ansiamos la llegada de las vacaciones para descansar, para colgar el estrés en el armario y tenerlo lejos al menos 15 días, un mes… pero a muchos el estrés se les cuela en la maleta. Es lo que llaman los expertos estrés estacional.

Para superarlo hay que planificar las vacaciones, practicar aficiones y fomentar la comunicación ayuda a evitar el estrés en vacaciones. Así lo recoge el manual con recomendaciones para superar el estrés estacional que ha elaborado la Unidad del Viajero y el servicio de Psicología del Hospital Sanitas CIMA de Barcelona.

Según la doctora del servicio de Psicología del Hospital Sanitas CIMA, Anna M. Cuscó, los casos de angustia, ansiedad y estrés en vacaciones se deben fundamentalmente a los cambios que representa este periodo frente a la rutina y que impiden que se descargue la tensión por los mecanismos habituales.  

Algunas de las situaciones desencadenantes son dedicar más tiempo a las relaciones familiares y sociales; organizar las vacaciones; cambiar el lugar de residencia; encontrarse en destinos desconocidos y la dependencia del trabajo.

La experta explica que "por otro lado, el entorno de crisis favorece que se acumulen tensiones y miedos que conllevan un importante desgaste emocional y que puede originar episodios de estrés o malestar coincidiendo con las vacaciones".

En este sentido, la experta ha informado de que el estrés estacional suele manifestarse de forma leve o moderada con síntomas como irritabilidad, inquietud o dificultades en las relaciones familiares y sociales. También, ha proseguido la responsable de la Unidad del Viajero del Hospital Sanitas CIMA, María de Arquer, tiene consecuencias en el plano físico con trastornos digestivos, problemas para conciliar el sueño, cansancio, mareos o dolores de cabeza.

Por todo ello, los especialistas recomiendan:

  • Planificar con tiempo el viaje
  • Desconectar y establecer límites con el trabajo
  • Evitar el uso abusivo de nuevas tecnologías
  • Normalizar los cambios
  • Dedicar tiempo a actividades placenteras
  • Fomentar la comunicación con la pareja y los amigos
  • Llevar una alimentación equilibrada
  • Dormir ocho horas diarias
  • Practicar alguna técnica de relajación
  • Intentar que la vuelta a casa sea de manera gradual
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