La Obra Social Caja España-Duero conmemora el centenario del nacimiento de Juan Antonio Gaya Nuño con una exposición en el centro cultural que lleva su nombre en la capital soriana y que muestra 46 obras del legado de este soriano, que está compuesto por más de 180 piezas.

El director de la Obra Social, Antonio Sánchez Puerto, ha explicado en el transcurso de la inauguración de la muestra, que podrá visitarse hasta final de año, que la exposición "tiene la particularidad de que todos los cuadros corresponden a autores del siglo XX" que conoció Gaya Nuño en su tarea de crítico de arte y trabajando como director de la Galerías Laietanas de Barcelona, "lo que le hizo estar en contacto con grandes pintores".

Además, en cada una de las 46 obras que se han seleccionado para esta muestra, se ha adjuntado el comentario sobre la misma que realizó en su momento el propio Juan Antonio Gaya Nuño.

"Esta exposición es una puesta de largo del fondo de Caja España-Duero", ha significado Sánchez Puerto, teniendo en cuenta que la entidad custodia el legado del autor soriano.

La idea de dar "continuidad" a esta exposición, hasta el punto de que pueda convertirse en permanente, aún no se ha madurado, si bien el responsable de la Obra Social ha asegurado que "habrá que ver cómo se continúa mostrando el legado de Juan Antonio Gaya Nuño".

La exposición lleva por título 'Fondos Artísticos del legado de Gaya Nuño' y supone un punto de referencia para conocer su colección de arte del siglo XX.

El legado de Gaya Nuño permite disfrutar de una de "las mejores recopilaciones y estudios" sobre el arte contemporáneo español, estando además abierto a todos los investigadores interesados por la historia del arte y la figura de Gaya Nuño, ya que está digitalizado desde el año 2005.

Todas las obras pertenecen a un conjunto de escultores y pintores coetáneos a Gaya Nuño y están representadas todas las tendencias: el modernismo de Ramón Casas, o el realismo de Amalia Avia y José Luis Verdes, así como expresionistas como Ramón Rogent y Jaume Mercadé, cubistas como Daniel Vázquez Díaz y Pancho Cossío, surrealistas como José Caballero, Modest Cuixart y Joan Ponç, y obras abstractas de Juan Barjola, Enric Planasdurá y Francisco Echauz, sin dejar pasar el formalismo de Viola, Millares y Tàpies.

Las diferentes escuelas artísticas de la época dan lugar a grupos que aparecen representados en el legado de Gaya Nuño como los catalanes de Dau al Set, la Escuela de París, la Escuela de Madrid, Lais, ADA, el Paso, la Escuela de Vallecas, Ladac y el Grupo de Murcia.

De este modo, en la exposición se puede comprobar la diversificación del arte en técnicas y soportes durante la década de los sesenta, que está representada por la pintura naïf de Lorenzo Aparicio y María Pepa Estrada, la ilustración gráfica de Esplandiú, Álvaro Delgado y Luís García Ochoa, la escenografía teatral y cinematográfica de Redondela y Guinovart, la pintura mural de Eduardo Vicente y Vela Zanetti, las esculturas de Oteiza y Pablo Serrano, y las intervenciones paisajísticas de César Manrique.

La colección de Gaya Nuño cuenta con tres bloques fundamentales, bibliográfico, documental y artístico, en total 24.000 registros que se pueden consultar en www.cajaespana-duero.es/obrasocial/.