El aeropuerto madrileño de Barajas cumple 80 años de vuelos comerciales

  • El 15 de mayo de 1933 tomó tierra en él un trimotor Fokker VII.
  • La inauguración oficial se realizó, no obstante, el 30 de abril de 1931.
  • El aeródromo se construyó para suplir a los de Alcalá, Carabanchel y Getafe; por él han pasado más de 990 millones de pasajeros en 10,65 millones de vuelos.
Fotografía facilitada por AENA de un cartel de la compañía LAPE (Líneas Aéreas Postales Españolas), que más tarde se convertiría en Iberia, la cual fue la que inició en 1993 los vuelos regulares a Barcelona.
Fotografía facilitada por AENA de un cartel de la compañía LAPE (Líneas Aéreas Postales Españolas), que más tarde se convertiría en Iberia, la cual fue la que inició en 1993 los vuelos regulares a Barcelona.
EFE
Fotografía facilitada por AENA de un cartel de la compañía LAPE (Líneas Aéreas Postales Españolas), que más tarde se convertiría en Iberia, la cual fue la que inició en 1993 los vuelos regulares a Barcelona.

El aeropuerto de Madrid-Barajas cumple este miércoles 80 años de su apertura al tráfico comercial, aunque la inauguración oficial se realizó el 30 de abril de 1931. Por sus pistas e instalaciones han pasado más de 990 millones de pasajeros en 10,65 millones de vuelos.

El 15 de mayo de 1933 tomaba tierra en el llamado Aeropuerto de Madrid un trimotor Fokker VII. El aeródromo se construyó para suplir a los de Alcalá, Carabanchel y Getafe. La apertura al tráfico civil comercial, realizada por orden ministerial del 24 de abril de 1933, no entró en vigor hasta tres semanas después.

Las edificaciones ya construidas y las terminadas ese año permitieron que la compañía estatal Líneas Aéreas Postales Españolas (LAPE), creada por el gobierno republicano y una vez recibido el material incautado a la nacionalizada CLASSA, pudiera trasladarse definitivamente desde el aeródromo de Getafe al aeropuerto de Barajas.

Las primeras líneas regulares desde Barajas de LAPE (compañía que más tarde se convertiría en Iberia) tendrían por destino Barcelona y Sevilla. Las tarifas de esos vuelos, aprobadas en diciembre de 1932, eran de 150 pesetas para el billete de Madrid a Barcelona y de 125 pesetas para los Madrid-Sevilla.

Además, para las mercancías y el exceso de equipaje la tarifa era de 1,50 pesetas por kilogramo a Barcelona y 1 pesetas por kilo a Sevilla, en los Fokker VII/3M con capacidad para sólo 8 pasajeros y dos tripulantes.

En aquel año 1933, con el teniente coronel Jacobo de Armijo y Fernández de Alarcón como primer director, se operaron 378 vuelos que transportaron a 2.873 pasajeros en un aeropuerto que aunque no contaba con un edificio terminal ni pistas asfaltadas.

Tenía un hangar de 90x30 metros, un edificio para prueba de motores y el mando, una instalación enterrada de 3 depósitos de gasolina de 100.000 litros cada uno y otro para aceite, un edificio central eléctrica, un chalet y un hangar de la CEA, así como accesos por la carretera general de Madrid a Francia y por la carretera de Canillejas-Barajas a Paracuellos del Jarama.

El aeropuerto de Madrid- Barajas se ha convertido en uno de los principales del mundo por tráfico de pasajeros y de aeronaves y da servicio a más de 45 millones de viajeros cada año. Desde sus pistas, cerca de 80 compañías aéreas vuelan regularmente a 179 destinos en 65 países de cuatro continentes.

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