Lorca vivirá este sábado el segundo aniversario del terremoto de 5,1 grados que la destruyó en 2011 sin actos conmemorativos y dedicada a trabajar en la reconstrucción. Hasta el momento se han invertido casi 670 millones de euros, la mitad del dinero previsto.

Después de la tragedia, que causó nueve muertos, 324 heridos y daños por 1.200 millones, en Lorca fueron derribadas 1.152 viviendas que estaban habitadas de las que 430 ya están en fase de reconstrucción, un 37,3%, según el alcalde, Francisco Jódar.

Las obras de reconstrucción afectan ya a una veintena de bloques que suman 390 pisos y otras 40 casas unifamiliares están siendo reedificadas. El ayuntamiento ya ha otorgado más de 1.000 licencias para la reconstrucción de viviendas y se trabaja, con máquinas o sobre plano, en solares con una superficie global de 70.800 metros cuadrados, el 70% de lo demolido.

El Consorcio de Compensación de Seguros ha pagado 450,5 millones en indemnizaciones, de los que 376 son para reconstrucción de casas y el resto para reparación de comercios e infraestructuras públicas.

La mayor parte de los edificios en obras no serán habitables hasta 2015, aunque en algunos casos los trabajos terminarán en unos meses y sus propietarios podrían regresar a mediados de otoño al hogar del que huyeron el 11 de mayo de 2011. Un horizonte de grúas compone el nuevo "skyline" de la ciudad.

Se calcula que unas 3.500 personas siguen fuera de sus casas, la mayor parte en régimen de alquiler por realojo, una figura para la que hasta el momento se han aprobado medidas de asistencia pública por 7,5 millones. De ese dinero, solo 3,3 millones han llegado a los afectados, que han cobrado las ayudas correspondientes a un cuatrimestre, aunque muchos de ellos llevan dos años viviendo de alquiler.

La cuestión de las ayudas, que cofinancian al 50% las administraciones central y autonómica, sigue siendo la más polémica dos años después, un período en el que se han celebrado 24 reuniones de la Comisión Mixta en las que se han resuelto 13.745 solicitudes de ayuda de las 16.097 formuladas, casi un 86%.

Las ayudas públicas aprobadas superan los 52 millones de euros, aunque solo han sido ingresados a los afectados 30,5 millones, 25 en concepto de reparaciones (el 81 por ciento del total aprobado) y 1,2 para reconstrucciones (de los 13,2 millones aprobados), además de los 3,3 millones de ayudas al alquiler.

Durante el tiempo transcurrido desde los seísmos, la solidaridad ha sido la única fuente de ingresos de miles de damnificados y la Mesa Solidaria, el organismo que recibe los fondos producto de donaciones, ya ha repartido casi 4,3 millones entre unas 4.500 familias damnificadas.

En estos dos años la labor de las ONG ha sido fundamental para centenares de familias y Cruz Roja, por ejemplo, ha atendido a más de 12.000 damnificados, ha movilizado unos 2.000 voluntarios y ha destinado 1,6 millones para llegar donde no lo hacía la intervención pública.

El Gobierno de España ha destinado a Lorca desde 2011 unos 664 millones de euros, aunque no todos los programas se han ejecutado en su totalidad, a los que se suma una aportación prevista de 227 millones hasta el año 2020, ha dicho la comisionada del Ejecutivo para la recuperación de la ciudad, Inmaculada García.

Según el consejero de Obras Públicas, Antonio Sevilla, la reconstrucción y recuperación de Lorca costará al Gobierno de Murcia 326 millones, de los que 279 corresponden al "Plan Lorca +" en el que participan las tres administraciones, y del que 185 millones proceden de un préstamo concedido en 2012 a la Comunidad por el Banco Europeo de Inversiones (BEI).

La catástrofe también tendrá un saldo negativo para el ayuntamiento de 27 millones de euros hasta 2020, que se suman a los 24 millones ya invertidos en emergencias, recuperación de infraestructuras y exenciones fiscales.

Los políticos esperan que el dinero previsto, la ingente cantidad de obras públicas anunciadas, el proceso de regeneración urbana integral y el fortalecimiento económico tengan un efecto balsámico en el paro, que en Lorca (92.000 habitantes) afecta a 8.000 personas, 826 más que cuando ocurrieron los seísmos.

La nueva cara de Lorca la muestran monumentos restaurados como el palacio de Guevara, miles de fachadas con aspecto remozado o el parador de turismo más moderno de España, inaugurado hace un año en un castillo del siglo XIII, una atalaya que muchos eligen ahora para divisar el movimiento panorámico de las grúas.