Algunos casos destacados

• José Ignacio Goirigolzarri. Cobrar una pensión y volver a trabajar es el caso del actual presidente de Bankia. Goirigolzarri salió del BBVA en 2009, donde era consejero delegado, con una pensión por jubilación anticipada de 68,6 millones de euros —52 de ellos correspondientes a resultados de ejercicios anteriores—, como recoge el informe anual de la entidad del año 2009 en su página 165. Actualmente, Goirigolzarri percibe en el banco intervenido por el FROB 500.000 euros anuales, y tiene derecho a una variable del 50% respecto a la retribución fija.
• Francisco González. Otro banquero que disfrutará en los próximos años de una pensión sustanciosa es el presidente del BBVA, Francisco González, que recibirá 79,7 millones de euros en concepto de jubilación cuando decida retirarse, ya que aún ejerce. Así consta tanto en la memoria de 2009 como en la información remitida por el banco a la CNMV días antes de una Junta General de Accionistas.
• Fred Goodwin. Fuera de España, existe otro caso muy criticado de un banquero con una retirada millonaria. Se trata de Fred Goodwin, exconsejero delegado del Royal Bank of Scotland, al que se considera responsable de dejar en el banco unas pérdidas de más de 20.000 millones de libras, y que percibe 700.000 libras anuales de pensión (unos 762.000 euros). A pesar de que la entidad tuvo que ser rescatada por Reino Unido, Goodwin, que recibió muchas críticas y fue apodado como La trituradora, no renunció a su pensión —algo que le pidió el propio Gobierno británico—. Su caso indignó a los ciudadanos de las islas, lo que provocó que incluso llegaran a atacar su casa.
• Aurelio Izquierdo. Al exdirector financiero de Bancaja (integrada en Bankia) se le negó la pensión por su gestión. Izquierdo tenía derecho a 13,9 millones de pensión. Pero Bankia le negó disfrutar de esta cantidad al defender que esta obligación con el banquero no les correspondía a ellos, sino a Bancaja... a pesar de que ésta última formaba parte de su grupo financiero.