Peleas como las que el pasado mes de junio registraron las cámaras del Metro de Madrid en la estación de Oporto, cuyo vídeo circula ya en la Red, son "frecuentes" en el suburbano y han ocasionado protestas reiteradas de los vigilantes, que reclaman más seguridad, según la organización Alternativa Sindical.

El vídeo de Oporto, dice Alternativa Sindical, circula entre los vigilantes desde hace varios meses incluso a través de teléfonos móviles.

En las imágenes se ve una reyerta en un andén en la que intervienen varias personas; una de ellas acaba con la camiseta ensangrentada por una puñalada y varias caen a la vía.

Uno de los dos vigilantes que intentaron sin éxito parar la trifulca ha sido, al parecer, retirado de su puesto en la estación.

El trabajador que filtró el vídeo a la prensa también ha sido despedido.

Los vigilantes denuncian la constante "inseguridad" que padecen en su trabajo.

Las estaciones más conflictivas, además de Oporto (L5 y 6), suelen ser Abrantes (L11) y Carabanchel (L5), aunque la que "se lleva la palma" es la de Pan Bendito (L11).

"Nos sentimos impotentes y no sabemos qué hacer. El vigilante se siente inseguro en el Metro y tiene que soportar insultos y navajazos".

En el gremio de los vigilantes del suburbano, las bajas por depresión, dice el portavoz sindical, van en aumento.

"Falta presupuesto"

En la red trabajan aproximadamente unos 1.400 vigilantes, repartidos entre puestos fijos en las estaciones y patrullas. Los vigilantes acusan a Metro de reducir el presupuesto y, por consiguiente, el número de efectivos.

Metro responde que peleas como las del vídeo de la estación de Oporto "son hechos aislados" y que en el suburbano no se llega a 2.000 delitos al año.

El presupuesto para seguridad, dice Metro, se ha aumentado de 57 a 64 millones de euros y las estaciones se refuerzan en función de las necesidades.

El antecedente de Puerta del Sur

Las peleas en el Metro han llegado a ser tan violentas que han obligado a suspender el servicio.

Eso ocurrió en octubre, cuando la Línea 10 dejó de funcionar dos horas entre Cuatro Vientos y Puerta del Sur por la descomunal pelea que sucedió en esta última y en la que fueron heridos varios vigilantes.

Puerta del Sur es utilizada por cientos de jóvenes que salen de copas los fines de semana en Costa Polvoranca, Alcorcón.