Representantes de la patronal y sindicatos de Hostelería han mostrado este viernes su respaldo al gerente de la sidrería 'El Lavaderu' asistiendo a comer al local, para mostrar no solo su apoyo sino también para dar ejemplo ante la ciudadanía de que el restaurante es seguro y que, el suceso del envenenamiento de uno de los empleados a sus compañeros, fue algo puntual que no afectó a los clientes.

Así lo ha señalado a Europa Press el presidente de Hostelería de Asturias, José Almeida, quien ha estado acompañado por el presidente de la Junta Local de Oviedo de la misma organización, Miguel Angel de Dios, el presidente de Hostelería de Gijón, Ricardo Álvarez, el vicepresidente de la Unión Hotelera de Asturias, Angel Zubizarreta y representantes de UGT y CC.OO. Al inicio también se acercó el edil de Desarrollo Económico y Empleo, Fernando Couto.

Almeida ha incidido en que se ha tratado "de una simple circunstancia con consecuencias muy graves", pero ha agregado que la vida continúa y que el hostelero debe salir adelante. Ha sido un caso "desagradable y fortuito" en el que se ha visto inmerso un local que durante años hizo las cosas bien y se dedicó a sus clientes.

Ha destacado, asimismo, la importancia del asociacionismo empresarial, y ha indicado que este también está para mostrar su apoyo en estos casos. En este sentido, ha apuntado que el gerente, Juan Luis Alfonso Alonso, está pasando por una situación "desagradable", aunque le consta que ha agradecido este "simple y humilde detalle" de la patronal y sindicatos y que la ha dado ánimos.

20 DENUNCIAS

Hasta ahora son ya 20 las denuncias contra el ayudante de cocina, A.A.F.F., de 55 años, vecino de Gijón aunque natural de Ciaño, al que se le acusa de echar 'cianamida cálcica' a sus compañeros, un preparado que se vende en las farmacias bajo el nombre de 'Colme', y que se utiliza en el tratamiento del alcoholismo crónico. El producto, mezclado con alcohol, provoca reacciones fuertes como vómitos, mareos o taquicardias, e incluso la muerte si no se administra bien.

El hombre, que carece de antecedentes, fue detenido el pasado 4 de febrero acusado de un delito Contra la Salud Pública y otro de lesiones, aunque el Juzgado le ha imputado ya 14 intentos de homicidio.

A estas 14 acusaciones, se han unido seis nuevas denuncias tras hacerse públicos los hechos. Además, la familia de un cocinero fallecido en el local en 2011 quiere que se investigue si la parada cardiorrespiratoria que sufrió puede estar relacionada.