La agencia de calificación crediticia Fitch ha retirado la vigilancia negativa sobre la calidad crediticia de Iberdrola, al tiempo que mantiene la perspectiva negativa y la nota de 'BBB+' (primera nota dentro de la calidad aceptable) para su 'rating'.

En una nota, la agencia advierte de que persisten los riesgos relacionados con la situación macroeconómica española y su bono soberano, así como con las próximas medidas regulatorias en el sector energético español y con la ejecución del plan estratégico de la propia compañía.

No obstante, Fitch indica que estos riesgos regulatorios, asociados al nuevo proyecto de ley de fiscalidad eléctrica, ya han sido tenidos en cuenta en anteriores comunicaciones de 'rating' emitidas por la propia agencia, por lo que la nota actual ya recoge este factor de incertidumbre.

En la actualidad, el 'rating' de Iberdrola se encuentra un escalón por encima del de España. La metodología de Fitch permite que esta diferencia sea de hasta tres escalones, en función de la diversificación geográfica de la compañía.

La agencia espera que Iberdrola sea capaz de sortear los efectos negativos de la nueva reforma energética gracias a una estrategia a medio plazo que, entre otros aspectos, incluye un recorte de las inversiones y la venta de activos.

En todo caso, la nueva estrategia también conlleva riesgos de ejecución, advierte. El plan de la eléctrica incluye una reducción de deuda por 6.000 millones hasta 2014 mediante la venta de activos por 2.000 millones, la titulización del déficit de tarifa por 3.000 millones y un aumento del flujo de caja provocado por las menores inversiones.