Según informaron fuentes del Departamento de Salud del Gobierno de Aragón, la mayoría de los alumnos han sido atendidos en el Hospital Universitario Miguel Servet, donde han quedado ingresados cinco menores -dos chicas de 16 años y tres chicos de 12-, con contusiones, fracturas y traumatismos.

Un menor permanece en observación en el mismo centro sanitario, 14 han sido dados de alta y se espera que en las próximas horas otros tres jóvenes también sean dados de alta.

Por otra parte, una chica ha sido atendida en el Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa y otros cuatro estudiantes en el Royo Villanova.

De estos últimos, tres ya han sido dados de alta y una cuarta menor ha sido trasladada al servicio de Traumatología del Hospital Miguel Servet.

La conductora del autobús accidentado, R.G.G., de 27 años, fue atendida de múltiples lesiones en la Mutua de Accidentes de Zaragoza (MAZ), y ya ha sido dada de alta al no necesitar hospitalización, señalaron en la Dirección Médica del centro.

La conductora se distrajo

El autobús escolar  se dirigía al Instituto de Educación Secundaria Itaca, en el barrio zaragozano de Santa Isabel, con alumnos de entre 12 y 16 años procedentes de Perdiguera, informaron fuentes del Departamento de Educación del Gobierno de Aragón.

El suceso ocurrió alrededor de las 8:15 horas, a la altura del kilómetro 13,700 de la carretera A-129, cuando al parecer, según fuentes de la Guardia Civil, se produjo una distracción de la conductora al salir de una curva a un tramo recto.

El vehículo, marca Volvo y matriculado en 1992, chocó con una arqueta, saltó un pequeño barranco e impactó contra un terraplén, por lo que la Guardia Civil de Tráfico consideró sorprendente que no volcara.

El autobús había pasado el control ITV y tenía toda la documentación en regla, según indicaron a fuentes de la empresa propietaria, Therpasa, y de la Guardia Civil de Tráfico.

Los daños más visibles han sido en la parte delantera del autobús, mientras que los asientos traseros son los que más han sufrido el impacto.

El autobús suele trasladar cada día a 31 alumnos de Leciñena y 19 de Perdiguera.

Al lugar del siniestro, cercano a la capital aragonesa, se desplazaron bomberos de Zaragoza, personal sanitario del Centro de Salud de Villamayor, del 061 y del 112, además de agentes de la Guardia Civil de Tráfico y padres de los pequeños.

50 kilómetros en sentido contrario

Por otro lado, un hombre, de 28 años de nacionalidad rumana ha sido detenido por conducir con una tasa de alcoholemia cuatro veces superior a lo permitido, cincuenta kilómetros en sentido contrario en la autopista A-23, en la provincia de Teruel, la mayor parte de ellos huyendo de los agentes.

Según la Dirección General de Tráfico (DGT), el conductor, que se encuentra a disposición judicial por conducción temeraria, circulaba por la A-23 (que une Sagunto con Burgos) a la altura de Calamocha (Teruel) en sentido contrario y cuando dos agentes le ordenaron que parara el vehículo hizo una maniobra evasiva y chocó contra una valla.

El vehículo siguió circulando en sentido contrario hasta que fue arrestado por la Guardia Civil, que tras practicar dos pruebas de alcoholemia al detenido comprobaron que tenía cuatro veces el nivel permitido.

Veintidós personas fallecieron este fin de semana en los diecinueve accidentes de tráfico mortales ocurridos en las carreteras, en los que resultaron además heridas graves siete personas y otras catorce leves.