Divulgan una guía para que los madrileños tampoco paguen el euro por receta

El colectivo  catalán Dempeus per la salut pública (En pie por la salud pública) ofrece a los madrileños una guía para no pagar el euro por receta que ya abonan los pacientes catalanes y que empezará a cobrarse en la región a partir del 1 de enero.

"Hay que tener claro que el euro por receta es injusto"A través de un esquema de seis pasos, Dempeus explica como oponerse a la medida que también es rechazada por la Sociedad Española de Farmacia Comunitaria (Sefac). Como esta, Dempeus considera que la medida supone un repago que perjudica y discrimina a los pacientes de estas dos comunidades autónomas, ya que tendrán que sufragar una tasa de la que el resto de españoles está exento.

Las fases para hacerse insumiso comienzan con "tener claro que nos quieren obligar a pagar una cosa que ya hemos pagado" y acaban con el paciente tomando su medicación "tranquilamente".

Para hacerse objetor, explica el manual, solo hay que tener a mano la propia receta, el DNI y la tarjeta sanitaria. Cuando el paciente se niegue a pagar, el farmacéutico le entregará un formulario en el que tendrá que poner el su Número de Identificación Fiscal (NIF), nombre y apellidos, dirección, código postal y número de teléfono, además del Código de Identificación Personal (CIP) que se incluye en la tarjeta sanitaria.

Aunque no pague el euro, el paciente podrá abonar el medicamento y llevárselo a casa sin ningún problema.

Dempeus también soluciona algunas de las dudas que pueden surgir a los enfermos, por ejemplo, qué ocurre si el farmacéutico se niega a facilitar el formulario o qué puede pasar si la Administración abre un procedimiento administrativo para exigir el pago de la tasa.

Sobre el primer caso, el colectivo advierte que el boticario puede ser denunciado por denegación de asistencia. En el segundo, lo que ocurre en Cataluña es que el Gobierno de la Generalitat puede reclamar la liquidación y recaudación de tasas y apremio, lo que incluye una penalización de un 20%. Es decir, que en lugar de 1 euro, el paciente acabaría pagando 1,20€ por receta.

Para la Administración, el coste de poner en marcha el proceso de reclamación es superior al dinero que obtendrá finalmente, por lo que los colectivos que promueven la "desobediencia civil" esperan que ello les haga desistir de intentar el cobro.

En Madrid, la Consejería de Sanidad aún no ha detallado la normativa aplicable al euro por receta, pero asambleas populares vinculadas al movimiento 15-M como la Vallecas ya han comenzado a distribuir este manual de insumisión.

La dirección nacional del PP se ha desmarcado de la opción del euro por receta por considerar que el método no es ni equitativo ni igualitario, según su vicesecretario de organización, Carlos Floriano. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, rechazó la medida este martes afirmando que se plantea llevarla al Tribunal Constitucional.