Efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil de Cuenca y agentes medioambientales de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha han detenido a una persona en Villar y Velasco, el pasado día 31 de octubre, como autor de un delito relativo a la protección de la flora y fauna.

Los hechos se remontan al pasado día 27 de octubre, cuando un cazador comprobó que los tres perros con los que cazaba habían muerto tras ingerir trozos de carne que se encontraban esparcidos sobre el terreno, según ha informado la Delegación del Gobierno en nota de prensa.

Ante la sospecha de que la muerte de los animales pudiera haberse originado por la ingestión de cebos impregnados de tóxico, se activó el protocolo de búsqueda y recogida de cebos y cadáveres, previsto en el Plan Regional sobre uso ilegal de venenos, en cuyo desarrollo se contó con el apoyo de una unidad canina, dependiente de la Junta, especializada en la detección de este tipo de sustancias.

Como resultado de la búsqueda posterior fueron hallados el cadáver de un cuarto perro y 49 trozos de carne impregnados de una sustancia negra granulada.

Las pruebas obtenidas durante la investigación llevada a cabo propiciaron la detención de un hombre, de nacionalidad española, por un delito contra la flora y la fauna. Esta detención se llevó a cabo el día 31 de octubre pasado en el término municipal de Villar y Velasco.

La Guardia Civil ha instruido las pertinentes diligencias que, junto con el detenido y sustancia negra granulada, incautada a esta persona, han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Cuenca.