A partir de este sábado llegará el "otoño meteorológico" con la entrada de una borrasca que traerá precipitaciones a Galicia, tras un verano que resultó fresco en el Suroeste y lluvioso en el extremo occidental gallego, según ha destacado el responsable de atención a usuarios de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), José María Pascual.

En rueda de prensa, Pascual ha evitado hacer pronósticos de cara a la estación otoñal puesto que los restos de una tormenta tropical dificultan los modelos de predicción, sin embargo ha apuntado hacia a un "otoño normal" que llegará a Galicia desde este fin de semana. "En los próximos días llegará una borrasca con precipitaciones que incluso puede provocar alerta amarilla en el litoral", ha comentado.

Respecto al balance del verano, ha señalado que fue "fresco" marcado por una anomalía en las temperaturas superior a un grado, superando los valores normales en el extremo norte y tercio oriental, mientras que el resto de la comunidad gallega los valores fueron más bajos de lo habitual, especialmente en las Rías Baixas. Esta situación se debe, según Pascual, al cambio en la dirección de los vientos, al estar bajo la influencia de vientos de Suroeste en lugar de Nordeste.

En cuanto a las precipitaciones, el trimestre junio-agosto resultó lluvioso en el Norte y tercio oriental, con valores que, en zonas del litoral de A Coruña, llegaron casi a duplicar los normales para la estación. Destacan las lluvias recogidas durante los días 13, 14 y 24 de agosto que provocaron un superávit de precipitación en la mitad oeste, especialmente en la franja costera occidental de la provincia coruñesa, donde se llegó a duplicar el valor medio del mes.

"temperaturas más bajas"

En términos generales, según ha resumido el responsable de atención a usuarios el verano ha resultado "normal" en cuanto a precipitaciones y "con temperaturas más bajas respecto a otros años aunque no ha sido de los peores". No obstante, contrasta la situación el caso de la provincia de Pontevedra que ha vivido el verano más fresco desde 1986, mientras que en A Coruña ha tenido temperaturas más altas respecto los valores habituales.

Sin embargo, la situación gallega difiere con la del resto de España, que ha tenido el cuarto verano más cálido y el segundo más seco desde 1971. Respecto a las precipitaciones, 2012 está siendo el segundo año más seco desde 1947, solo superado por los valores de déficit en precipitaciones de 1994.

SEQUÍA

Respecto a la evolución de este año hidrológico en Galicia, se mantiene el déficit de precipitaciones que ya era notable en la estación invernal y que no se recupera "a pesar de las lluvias primaverales". Así, este año es el segundo más seco después del periodo de 1953.

Además, Pascual ha alertado de la frecuencia con la que se dan los periodos de sequía en los últimos 10 años. "Antes tardaban en darse 20 años, ahora se dan cada 2 ó 3 años", ha sentenciado.