Trazos goyescos

Fuendetodos, Muel, Calatayud y Zaragoza cuidan del legado que el genial pintor aragonés dejó en su tierra.
En una casa de labradores, a 37 kilómetros de Zaragoza, nació el genial pintor aragonés que inmortalizó los momentos más importantes de la historia del siglo xviii. Frente a su casa natal hay instalado un gran busto de hierro forjado, obra del escultor turolense José Gonzalvo, que muestra al Francisco de Goya adulto, ese pintor que plasmó en muchas de sus pinturas el carácter y las costumbres del Aragón de la época. Así se puede ver en La merienda, La pradera de San Isidro o El bebedor, donde las referencias al vino, probablemente de la Cariñena que tan bien conocía, son constantes.

Fuendetodos, Muel, Calatayud, Zaragoza y la Cartuja Aula Dei son lugares de referencia para seguir la huella del genial pintor en la provincia que lo vio nacer. Además de la casa natal, Fuendetodos alberga el Museo del Grabado, donde se exhiben cuatro grandes series del grabados del autor: Los caprichos, Los desastres de la guerra, La tauromaquia y Los disparates.

El genial pintor comenzó su aprendizaje artístico en taller de José Luzán. Fue el inicio de una intensa relación con Zaragoza, donde diferentes espacios muestran las pinturas religiosas, grabados y retratos del artista.

Los frescos de la iglesia de la Cartuja Aula Dei (a 5 km de Zaragoza) sirvieron a Goya de carta de presentación ante la corte madrileña y marcaron un hito importante en su trayectoria artística. Para concertar visitas, que se realizan el último sábado de cada mes, hay que llamar al teléfono 976 715 583.

Las bóvedas del Coreto de la Virgen y de la Regina Martyrum, en la basílica del Pilar, reflejan la obra de un pintor maduro. El Museo de Zaragoza guarda cuatro series de grabados, cuatro originales de los Toros de Burdeos y algunos de sus mejores   retratos.

Calatayud, Muel (a 27 km) y Remolinos (a 30 km) guardan las tres series que el artista realizó con el tema de los Santos Padres de la iglesia occidental, que decoran las pechinas de las iglesias de San Juan el Real (Calatayud), las de la Ermita de la Virgen de la Fuente de Muel y las de la parroquia de Remolinos. Alagón custodia el mural El nombre de Dios, en el antiguo colegio de Jesuitas.

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