El delegado especial de la Agencia Estatal de Administración Tributaria de Castilla-La Mancha (AEAT), Eduardo Ventas de la Cruz, cree que solo el anuncio de la limitación —de 2.500 euros— del efectivo en transacciones económicas tendrá un "efecto disuasorio" y "cuando se apruebe la norma, lo tendrá más".

En este sentido, ha explicado que esta medida —a la que ha calificado de "medida estrella"— "determina que las operaciones que ahora se están realizando en efectivo, unas reales y otras simuladas, van a desaparecer".

Esto "va a permitir ver ese tipo de operaciones y comprobarlas y, en todo caso, si aún se siguieran haciendo, el efecto que prevé la norma es una sanción del 25 por ciento que va a afectar tanto al comprador como al vendedor, salvo que una de las partes denuncie la existencia de esa operación de efectivo".

Asimismo, ve adecuadas el resto de medidas que el Gobierno central ha propuesto para luchar contra el fraude fiscal y ha recordado que, por ahora, "son medidas que están en proyecto y que habrá que examinar cuando sean aprobadas y se conviertan en ley".

Aún así, ha subrayado que "a la Agencia Tributaria lo que le corresponde es aplicar las normas que manan del Gobierno y del Parlamento".