El promotor inmobiliario José Moreno, el 'pocero bueno', ha abandonado la huelga de hambre que mantenía desde el pasado día 3 ante la expectativa de una reunión pactada con La Caixa, para el próximo viernes en Madrid, en busca de una solución a la paralización de un proyecto de viviendas en Fuenlabrada, Pinto y Carranque (toledo) impulsado por cooperativistas que él iba a construir.

El mismo Moreno y el portavoz de su cooperativa, Tomás Rodríguez-Villasante, explicaron este miércoles que la cita del viernes es una "vía de diálogo importante" que el constructor esperaba para buscar la posibilidad de "llegar a un acuerdo". Con la huelga de hambre que ha llevado a cabo durante 17 días, Moreno pretendía protestar por el supuesto "engaño" del que fue objeto por parte de La Caixa.

Según el constructor, en el proceso de obtener financiación para el proyecto, La Caixa le exigió un informe previo del proyecto, la licencia de obra, el estudio geotécnico o los seguros necesarios, entre otros requisitos. Moreno  gastó en estas gestiones y en adquirir terreno más de 1,5 millones de euros procedentes de los abonos que le habían hecho los cooperativistas interesados en su proyecto de viviendas, y que después de dieciséis meses La Caixa le comunicó que el proyecto no le interesaba.

Algunos cooperativistas consultados por 20minutos creen que, si bien Moreno actuó de buena fe, se precipitó a la hora de invertir el dinero que ellos habían abonado.

El portavoz de la Cooperativa, el catedrático Rodríguez-Villasante afirmó que Moreno conserva los correos electrónicos en los que "durante dos años", La Caixa le anima a proseguir, calificando la operación con palabras o frases como "favorable", "positiva", "va adelante" o "sigan en esa línea". Sin embargo, según Rodríguez-Villasante, "en algún momento" La Caixa decide dejar de animar el proyecto y, "quizás por un cambio de estrategia" o por la misma crisis, cambió de parecer.

La Caixa, por su parte, afirma que "el análisis (de la operación) llevado a cabo resultó en la denegación de la financiación solicitada", decisión que fue comunicada a los interesados en noviembre de 2010. La entidad asegura que "no asumió ningún compromiso de financiación ni tiene concedido ningún crédito, ni tiene ningún documento que le vincule con un posible crédito" con Moreno.

Los cooperativistas, según las declaraciones de su portavoz, esperan que La Caixa reconozca su "corresponsabilidad", puesto que recurrir a la vía judicial sería "prolongar el sufrimiento de la cooperativa y de sus socios".