El marido de la reina Isabel II de Inglaterra, el príncipe Felipe, de 90 años, pasó su tercera noche hospitalizado en un centro médico de Cambridge (sureste de Inglaterra), sin que se haya informado de cuándo será dado de alta.

El duque de Edimburgo fue ingresado el viernes por la tarde de urgencia, tras sentir dolores en el pecho, y tuvo que ser sometido por la noche a una angioplastia para desbloquear una arteria coronaria.

El Palacio de Buckingham, en su último comunicado emitido este domingo, reiteró que el príncipe Felipe deberá estar "un corto período" en observación en el hospital Papworth de Cambridge, especializado en enfermedades del corazón, y que sigue de buen ánimo.

El esposo de la Reina ha tenido que pasar estas fechas navideñas ingresado mientras su familia está en la finca real de Sandringham, en Norfolk, donde se celebra la tradicional cacería que organiza el duque de Edimburgo cada año.

La familia real inglesa ha mantenido estos días su agenda si bien en los dos últimos días sus miembros se han acercado al hospital para ver al príncipe Felipe.

El sábado lo hicieron la Reina, de 85 años, y sus cuatro hijos, Carlos, Ana, Andrés y Eduardo, y ayer sus seis nietos adultos, entre ellos los príncipes Guillermo y Enrique, hijos del heredero de la Corona.

Los portavoces reales informaron de que la intervención coronaria fue "un éxito" mientras expertos médicos achacan a su avanzada edad el hecho de que Felipe de Inglaterra siga hospitalizado.

Felipe de Mountbatten, que nació en la isla griega de Corfú el 10 de junio de 1921, es el consorte más longevo en la historia de la monarquía británica.

El duque de Edimburgo lleva 64 años casado con la reina Isabel II, con quien tiene cuatro hijos, ocho nietos y una bisnieta