La empresa José Manuel Pascual ha decidido cambiar los uniformes de las enfermeras de sus hospitales tras la denuncia de un grupo de enfermeras de la Clínica San Rafael de Cádiz, a las que obligaba a vestir con falda, cofia y delantal.

El anuncio se produce tras una resolución del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) que insta a estos centros sanitarios a acatar una sentencia del Tribunal Supremo que consideró  "discriminatoria" la imposición de la falda.

La sentencia del alto tribunal consideraba "no objetivo" y "propio de otros tiempos" el obligar a llevar falda a las enfermeras frente al pantalón que usaban los trabajadores masculinos y el personal de quirófano.

Además, según dicha sentencia, "la uniformidad femenina que exige la empresa tiene un cierto componente tradicional o antiguo que se vincula con una serie de valores próximos a una posición no equilibrada de la mujer en relación con la del hombre".

Asimismo, según Adela Sastre, de Comisiones Obreras, la resolución es efectiva desde el 20 de octubre, ya que "el Supremo dio la razón a este sindicato el pasado mes de mayo en su actuación contra las clínicas Pascual, por lo que hemos ganado la guerra después de muchas batallas".

Los detalles del nuevo uniforme se presentarán mañana en el hospital Virgen de las Montañas de Villamartín (Cádiz), tras haber consultado con una comisión elegida por los empleados de todos los departamentos.

Según los sindicatos, se trata de un uniforme "homogéneo" para ambos sexos, conforme al plan de igualdad acordado por los trabajadores el pasado 26 de julio.