Almassora pide al Consell declarar su 'bou al carrer' de 1970 Patrimonio Cultural Inmaterial

El Ayuntamiento de Almassora (Castellón) instará a las Consellerias de Cultura y Gobernación de la Generalitat, así como al Consejo de Patrimonio Histórico de la Comunitat, a que los festejos de 'bous al carrer' sean inscritos como elementos integrantes del Inventario del Patrimonio Cultural Inmaterial.

El Ayuntamiento de Almassora (Castellón) instará a las Consellerias de Cultura y Gobernación de la Generalitat, así como al Consejo de Patrimonio Histórico de la Comunitat, a que los festejos de 'bous al carrer' sean inscritos como elementos integrantes del Inventario del Patrimonio Cultural Inmaterial.

La resolución, aprobada este lunes en pleno con el respaldo de todos los miembros de la corporación, será remitida esta misma semana a las diferentes administraciones públicas con el objetivo de obtener una declaración que tiene valor tanto en ámbito autonómico como nacional, según ha informado el Ayuntamiento en un comunicado.

"Se trata de una fórmula que debe ayudar a preservar una expresión histórica, singular y propia", ha señalado el concejal de Fiestas, Arturo Soler. Esta propuesta en la práctica inicia un procedimiento que quieren que culmine con una declaración que "pondrá en valor" las ferias y fiestas, así como los espectáculos o festejos taurinos que desde hace más de 200 años se celebran en Almassora.

Este procedimiento "abre un camino que debe culminar en la integración de estos festejos en el inventario del Patrimonio Cultural Inmaterial conforme a las disposiciones contenidas en la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO", ha señalado Soler.

El acuerdo adoptado parte de una propuesta presentada por la Asociación de Peñas Taurinas de Almassora (APTA), en la que incidía en la relevancia de los festejos populares como el 'bou al carrer', 'bou embolat' o los encierros taurinos, unos actos que se desarrollan de manera ininterrumpida en diversas épocas del año, como son las tradicionales fiestas de Santa Quitèria, en el mes de mayo, o las fiestas de la Mare de Déu del Roser, en el mes de octubre.

La propuesta se apoya en la consideración de los festejos como un "motor" que permite fomentar el desarrollo económico y turístico, "difundir nuestra cultura y promover los valores, costumbres, tradiciones y la afición taurina de nuestros pueblos, adquiriendo así un valor inestimable para los habitantes de toda la población de Almassora y de la provincia de Castellón".

El respaldo de la corporación al inicio del procedimiento para la declaración del 'bou pel carrer' como Patrimonio Cultural Inmaterial viene avalada por medio centenar de peñas taurinas.

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