¿Qué hacer con los impuestos? Subirlos, bajarlos o dejarlos estar. Con una recaudación a la baja por la crisis, la política de tributos abre el melón de los debates entre los dos principales partidos que aspiran a gobernar tras el 20 de noviembre, el PP y el PSOE.

El candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, anunciaba el lunes que si gana las elecciones "tocará los impuestos". En concreto anunció un cánon a la banca cuando acabe la reestructuración financiera y la recuperación del impuesto del patrimonio, pero reformado para que paguen más los que más tienen. Con el dinero que se recaude, que ha calculado en 2.500 millones, su gobierno impulsaría la creación de empleo, en especial para los más jóvenes. Estos dos impuestos están ya "decididos, trabajados y elaborados", dijo.

El Partido Popular también está preocupado por cómo mejorar los ingresos. Sin embargo, según el coordinador de Economía, Cristobal Montoro, los impuestos de Rubalcaba no le gustan, porque "no proporcionan financiación al Estado". Montoro insiste en que recuperar el tributo de patrimonio no es más que un guiño a la "izquierda" equivocado, porque podría "recaer sobre las clases medias", lo que, en su opinión, "sería muy negativo para la recuperación de la confianza de España".

En el PP ya han descartado un impuesto a las grandes fortunas y apuestan más bien por una "gran reforma fiscal", de la que no aportan mucho detalle.

Montoro dijo que el PP estudia una posible reforma tributaria en la que se prevé incluir el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF). El objetivo sería conseguir un sistema tributario "más eficiente", argumentó Montoro, quien explicó que el PP está "en esa tarea ahora". Tiempo atrás, el Partido Popular anunciaba que una de las bazas de su campaña sería una bajada de impuestos, sobre todo de el de sociedades, pero la situación económica actual y los retos del déficit público así como sus promesas de no realizar "tijeretazos" en los servicios básicos no casan con una bajada de impuestos.

Y en ese debate andaban las principales candidaturas cuando el Gobierno anunciaba que el Consejo de Ministros del próximo 16 de spetiembre podría recuperar ya mismo el impuesto de patrimonio, en concreto en los casos referidos a los grandes patrimonios.

La ministra Elena Salgado ya reconoció que la eliminación de un impuesto que sólo en 2007, el último año que estuvo en vigor, dejó 2.200 millones de euros a las arcas públicas fue "un error". Otra pista la daba recientemente José Blanco. Dijo que el Gobierno había descartado crear o aumentar un impuesto que grave a los más ricos, "por falta de tiempo", pero respecto a una posible modificación del impuesto sobre el patrimonio, dejaba abierta la posibilidad de llevar a cabo un cambio en este tributo.