El temor a una vuelta a la recesión ha llevado a las Bolsas europeas a volver a cerrar todas en rojo. El Ibex-35, principal selectivo de la Bolsa española, ha cerrado con un descenso del 1,37%, pierde los 8.200 puntos y encabeza las caídas europeas. Pese a haber ganado un 0,5% en este semana, las pérdidas mensuales llegan al 15%.

España ha anunciado en estos siete días una serie de medidas económicas como el acuerdo para la reforma la Constitución española y  fijar un límite de déficit; un nuevo paquete de medidas económicas, la prórroga de la prohibición de las ventas en corto junto con Francia, Italia y Bélgica; y tras el Consejo de Ministros de este viernes ha avisado de nuevas políticias de empleo. El crecimiento del Producto Interior Bruto del país se ha reducido de un 04,% a un 0,25 en el tercer trimestre.

Los grandes inversores internacionales se deshacían a lo largo del viernes de sus acciones ante el temor a que la economía vuelva a la recesión por los planes de austeridad y ahorro a los que están obligados los gobiernos por el elevado endeudamiento.

En el resto de Europa acababa prácticamente pareja, con París dejándose un 1,01%, Fráncfort que baja un 0,84% e Italia un 0,97%. Solo Londres ha medio salvado el día con una bajada exigua del 0,02%. La semana, otra más de nervios en el continente, finalizaba con una revisión a la baja del PIB de EE UU.

Con el rojo de la apertura de Wall Street, las Bolsas pronunciaban sus bajadas pero la vuelta al verde del Down Jones las europeas reducían considerablemente sus pérdidas, pero no podían imitar a Wall Street por la caída de las principales compañías.

Los inversores estaban este viernes atentos al discurso del presidente de la Reserva Federal estadounidense Ben Bernanke en la reunión de banqueros centrales en Jackson Hole. Según el texto divulgado por la Fed, Bernanke no propuso nuevas medidas pero ha asegurado que la institución está dispuesta a adoptar medidas para propiciar el crecimiento en el Comité de Mercado Abierto.

Está reunión tendrá lugar el 20 y el 21 de septiembre, dos días en lugar de la sola jornada prevista inicialmente para "permitir un debate más completo" sobre las medidas a tomar, adelantó el alto funcionario. "Está claro que la recuperación de la crisis ha sido mucho menos sólida de lo que habíamos esperado", señaló Bernanke

La banca central no tiene mucho margen de maniobra porque los tipos de interés están en mínimos históricos cercanos a cero en EEUU, Japón, Reino Unido y Suiza, por ejemplo, y ya se han inyectado cantidades ingentes de liquidez.