Renfe vivió este miércoles una nueva mañana complicada. Una avería en el sistema de electrificación paró la circulación entre las estaciones de Sant Vicenç de Calders y Vilanova i la Geltrú. La incidencia, que se alargó hasta las 11.30 horas, se registró a las 7.50 horas, informó la compañía. El Govern reclamó a Adif una auditoría del estado de la red para buscar soluciones a las continuas incidencias técnicas.

Varias líneas –Cercanías, Regionales y Larga Distancia– se vieron afectadas. En total, 50 convoyes y 15.000 viajeros perjudicados. Renfe puso un servicio de autobuses para cubrir el trayecto perjudicado de la R2 Sur. Con todo, cerca de 150 viajeros denunciaron que el autocar que debía recogerlos tardó dos horas en llegar.

Además de la R2, los regionales R13, R14, R15 y R16 y los trenes del Corredor del Mediterrani cambiaron su recorrido y fueron desviados por Vilafranca del Penedès.

Quejas de la Generalitat

El Govern cargó contra la gestora de la infraestructura, Adif. El conseller, Lluís Recoder, reclamó el traspaso de la red ferroviaria y "soluciones rápidas y contundentes" para acabar con los problemas en Cercanías.