El alcalde de Toledo, el socialista Emiliano García-Page, ha mostrado su respeto por el movimiento, señalando que comparte la idea de "nunca resignarse", pero ha rechazado el hecho de que se meta a los políticos "en el mismo saco".

Una reflexión que ha realizado a preguntas de los periodistas sobre el movimiento 'Democracia Real Ya' y sus reivindicaciones, ante las que, según Page, pretende tener "sensibilidad y tacto", aunque

ha hecho un llamamiento a la calma.

Sobre algunas de las quejas de este movimiento, el primer edil ha señalado que le indigna la generalización, en referencia a que se le relacione "con políticos que aspiran a varios cargos y que van de juzgado en juzgado". "Creo en la política en un sentido noble" ha añadido, y ha considerado que "meter a todos los políticos en el mismo saco es hacer el caldo gordo a los que hacen mala política".

El primer edil ha indicado que "sin querer aprovecharse del movimiento" va a quedarse "con el mensaje de fondo", y ha declarado que ha hablado desde facebook con algunos integrantes del movimiento para intercambiar opiniones con intención de "tener sensibilidad y tacto".

Problemas de la representación política

El alcalde de Toledo ha señalado que los problemas de la representación política en España son "la distancia entre políticos y ciudadanos" y "la representación territorial".

En este sentido, Page ha considerado que el debate sobre una reforma de la Ley Electoral es un tema "permanente" en España, "un país que no es homogéneo y en el que la representatividad es complicada", un problema que en muchos casos "impide llegar a acuerdos electorales", ha dicho.

Para el primer edil el Senado no cumple con la función que le corresponde a la hora de representar a los españoles. "No hay que suprimirlo pero es una asignatura pendiente", ha dicho García-Page. Otro tema a debatir sería el fomentar la cercanía entre los representantes políticos y los ciudadanos, según ha explicado.

Además, "sería bueno que los cargos de representación cada día fuesen más directos", ha dicho, señalando que está empezando a crecer una tendencia que da más importancia a los representantes políticos de forma independiente a sus partidos o a los ideales de las formaciones políticas, algo que ha valorado "porque la gestión la tienen que hacer las personas".