Los hosteleros de Málaga capital han cifrado entre un 28 y un 30 por ciento la bajada de ingresos, con respecto a 2010, durante esta Semana Santa, que consideran "la peor de los últimos 15 años". Este porcentaje podría, incluso, extrapolarse al resto de la provincia.

Así lo ha expresado el presidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Málaga (Aehma), Rafael Prado, quien ha afirmado a Europa Press que esta Semana Santa "ha sido totalmente atípica porque estamos acostumbrados a que llueva uno o dos días, pero no a tener incertidumbre todos los días".

El representante de los hosteleros malagueños ha reconocido que, pese a ser una Semana de Pasión "atípica", ha habido "mucha afluencia de público" en las calles, destacando sobre todo una mayor presencia de turistas extranjeros que otros años.

No obstante, ha hecho hincapié en que la incertidumbre y el mal tiempo que han marcado esta Semana Santa han hecho que, desde el punto de vista de restauración, "tuviéramos un movimiento como el de un día turístico normal, no el que se produce cuando todas las cofradías están en la calle".

Prado ha señalado, de igual modo, que se continúa notando la crisis económica: "seguimos absolutamente inmersos en ella y el retraimiento de los consumidores a la hora de pedir es evidente". Además, ha advertido de "las consecuencias negativas" derivadas de la prohibición de fumar.

La peor jornada, según el responsable de Aehma, ha sido la del Jueves Santo, teniendo en cuenta, además, que es el día grande de la Semana Santa malagueña: "ha sido el peor de la historia". Por el contrario, los mejores días han sido el Domingo de Ramos y, pese a la lluvia inicial, el Viernes Santo.

De los tres momentos significativos del año para el sector hostelero de la capital, la Semana Santa ocuparía el segundo lugar, detrás de la Feria de Agosto y por delante de la Navidad. Precisamente, suele ser el lanzamiento para comenzar la temporada alta de verano, algo que en esta ocasión, sin embargo, no se ha producido.

Promoción turística

Por otra parte, Prado ha opinado que sería conveniente que la promoción de la Semana Santa malagueña no se limitara únicamente al periodo entre los domingos de Ramos y de Resurrección, sino que comenzara una semana antes, aprovechando los traslados de los Sagrados Titulares, que "también pueden tener un atractivo para los turistas".

"Tendríamos una mayor afluencia de público, con muchas cosas que hacer y que ver, y, además, sería menos probable que hubiera dos semanas seguidas de lluvia", ha manifestado el presidente de Aehma, quien ha insistido, además, en la necesidad de que haya alguna actividad el Sábado Santo, de manera que "el turista no se vaya el viernes y permanezca hasta el Domingo de Resurrección".