Método curly: claves y pasos imprescindibles para recuperar y potenciar tus rizos

El método curly es una práctica para sacar máximo partido al pelo rizado.

Desde hace unos años, las melenas rizadas reivindican su puesto entre tendencias que las han condenado a pasar por el yugo de la plancha o los alisados. Hoy en día, son muchas las que buscan recuperar sus rizos o potenciarlos al máximo, para presumir de un espectacular cabello repleto de tirabuzones, con volumen, movimiento y cero encrespamiento. Eso sí, no es algo sencillo y, para conseguirlo, conviene llevar a cabo una serie de cuidados de forma habitual, así como el llamado método curly.

El método curly no es otra cosa que un conjunto de técnicas, consejos y productos recomendados que ponen en práctica los profesionales, pero también todas aquellas personas de pelo rizado desde sus casas, para conseguir unos rizos definidos, hidratados y llenos de brillo. Esta guía, que en su origen fue creada por la estadounidense Lorraine Massey, se basa en una serie de claves que detallamos a continuación.

Este es el recogido que más favorece a las melenas 'curly'

Todo empieza en el salón

Hay que ser muy consciente de que para poner en práctica este método o cualquier otro cuidado del cabello es importante dejarse guiar por profesionales e, incluso, que sean ellos quienes inicien el proceso, cuyos efectos tardarán al menos tres semanas en apreciarse, según Massey. Así, un buen primer paso para recuperar y/o potenciar tus rizos puede ser dirigirte a una peluquería especializada o que conozca la técnica. El corte, el peinado y una buena sesión de hidratación sentarán las bases para la rutina que quieras empezar a llevar a cabo en tu propia casa.

El lavado del pelo

Una mujer lavándose el pelo en la ducha.

Conchi Arias, fundadora de Campos Curlyhair, en Granada, explica que, a la hora de cuidar el cabello rizado, hay que empezar siempre por una buena higiene capilar. Para esto es imprescindible conocer cuál es tu tipo de cuero cabelludo: graso, medio o seco y, en función del mismo, elegir un tipo de champú u otro: astringente, a base de arcillas o elaborado a partir de aceites o mantecas. No en vano, en todos los casos, un champú sin sulfatos será una buena opción para limpiar suavemente el cabello.

Máxima hidratación

El acondicionamiento profundo es un paso clave en el método curly, para hidratar y suavizar el cabello y hacerlo más manejable. La experta recomienda, en este sentido, ver qué necesita el pelo a nivel interno: hidratación o reconstrucción. "Cuando nuestro cabello esté mojado, comprobaremos si se estira o no. Si no se estira nada, necesitará hidratación. Por eso, buscaremos mascarillas que tengan aceites y mantecas, que ayuden a que el agua se quede dentro de la fibra. Si nuestro cabello se estira demasiado, como si fuera un chicle, buscaremos que, aparte de aceites y mantecas, tenga ingredientes que nos ayuden a fortalecerlo a nivel interno, como citoqueratina, queratina hidrolizada o aminoácidos", cuenta Conchi Arias, de Campos CurlyHair.

Definir y potenciar los rizos

Una de las claves para peinar los rizos, después del lavado, es hacerlo con los dedos, en lugar de utilizar un cepillo o peine. Esto ayudará a evitar la rotura y la separación de los rizos, eliminando los enredos. Para definir los rizos, es importante emplear productos específicos para el cabello rizado, como cremas de peinado, geles y mousses. La estilista diferencia tres rutinas de peinado dependiendo del patrón del rizo:

En un cabello ondulado, para estilizar o definir, utilizaremos productos de acabado ligeros y con una buena fijación.
En un cabello rizado, usaremos geles ligeros que contengan proteínas para fortalecer la cutícula.
En un cabello afro lo más recomendable es una crema de peinado con proteína que aporte peso, que selle la hidratación y refuerce la cutícula

La clave de un buen peinado

Peinado 'curly' terminado — Peinado 'curly'.

Para poner el broche de oro a una rutina de pelo rizado, puedes sellar las puntas con algún aceite o producto de peinado específico, así como utilizar un difusor para secar el cabello, lo que ayudará a definir los rizos. La melena quedará lo suficientemente bonita como para llevarla suelta, pero también puedes optar por hacerte un peinado. Y es que aunque las melenas rizadas, tienen fama de ser poco versátiles para hacer según qué recogidos, no es el caso si se tiene un poco de maña.