El efecto Doppler: la clave que hace funcionar los radares de tráfico en España

Gracias al efecto Doppler, estos dispositivos de control que se ubican por las carreteras españolas pueden saber la velocidad exacta a la que circula un vehículo y proceder a sancionarle si supera los límites.

Radar fijo.
Imagen de archivo de un radar fijo.
Vídeo ATLAS
Radar fijo.

En España, el número de radares no ha parado de incrementarse en los últimos años, ya que el exceso de velocidad es la causa de la gran parte de las sanciones que interpone la Dirección General de Tráfico en nuestro país.

En la actualidad podemos encontrarlos de todo tipo, desde los radares fijos en los que se incluyen los de tramo, a los dispositivos móviles que pueden ser transportados en coches camuflados, en drones o en los helicópteros Pegasus. Asimismo, entre las últimas novedades han llegado los radares de semáforo y los aparatos de control de stop o líneas continuas. Pero es preciso indicar que todos ellos funcionan gracias al efecto Doppler.

¿Qué es el efecto Doppler?

Este efecto le debe su nombre a Christian Doppler, quien lo descubrió por primera vez en 1842, a que observó la curiosa interacción entre las ondas cuando aparecen cambios de frecuencia, que se perciben como un pequeño aumento o disminución en la tonalidad de una luz o un sonido. 

Por tanto, en el caso de los radares, este fenómeno actúa relacionando la velocidad de una a fuente, que es un coche, con el observador, que es el radar. National Geographic especifica un ejemplo en el que ocurre este efecto y que hace referencia a la situación cuando una ambulancia lleva la sirena puesta, el individuo la identifica porque su sonido es cada vez más alto y agudo cuando se acerca a este, mientras que disminuye cuando desaparece.

¿Cómo se aplica el efecto Doppler a los radares?

Imagen de archivo de un radar fijo tras un panel informativo de la DGT
Imagen de archivo de un radar fijo tras un panel informativo de la DGT
Getty Images/iStockphoto

Ahora bien, en estos dispositivos de control de velocidad las ondas no sonoras ni luminosas, sino que son electromagnéticas, por lo que efecto Doppler precisa que, si un vehículo se acerca hacia el radar, las ondas que se reflejan tendrán una frecuencia mayor, mientras que cuando se aleja la frecuencia será menor. 

En definitiva, un cinemómetro emite ondas de forma constante, entonces al pasar un coche a su altura, sus ondas chocan contra este y se reflejan. Por tanto, dependiendo de la velocidad del automóvil, la forma de las ondas electromagnéticas variará, por lo que se podrá calcular la velocidad exacta a la que circula el vehículo y con ello saber si supera o no, los límites de la vía.

¿Funcionan los radares de velocidad por la noche?

Desde la Dirección General de Tráfico desmienten el mito que había acerca de su no operabilidad durante las horas en la que no hay luz solar. Por lo tanto, estos aparatos para controlar la velocidad pueden multar las 24 horas del día, en parte gracias a su novedosa tecnología de infrarrojos, por la que no se produce un flash sobre el vehículo infractor.

Sí que es preciso indicar que durante la noche no tienen capacidad para operar los medios aéreos, es decir, el helicóptero Pegasus, y los drones que lo sustituirá. Además, los radares móviles instalados en los coches camuflados de la Guardia Civil también bajan su presencia en las carreteras en el periodo nocturno.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento