Compartir piso suele ser complicado en cuanto a que las costumbres de los inquilinos pueden ser muy variadas, por lo que pueden surgir roces o problemas de convivencia. En cualquier caso, no es nada comparado con lo que se encontró Ángela, una joven española de erasmus en Italia al volver de vacaciones a su piso compartido.
La tiktoker compartía piso con un hombre de 30 años que no estaba de erasmus, como sí lo hacía ella. La joven ya había subido vídeos describiendo a su compañero de piso como "la peor persona" que ha conocido y contando cosas como que usaba sus toallas, las de ella, para limpiar el suelo, le robaba alimentos, se quedaba dinero de la limpieza, ponía su tele a todo volumen...
Pero el vídeo que se ha hecho viral, con 4,2 millones de reproducciones, es el que muestra el estado del piso después de tan solo una semana de ausencia de Ángela.
El suelo de la cocina lleno de surcos y manchas secas de varios colores, la encimera con grasa, migas y cacharros sucios de todo tipo, el fregadero con una olla llena de algún líquido marrón, los quemadores con algo gelatinoso cubriendo el fondo y una sartén requemada y con grasa como para que una foca pasara el invierno, la terraza llena de bolsas de basura por no bajarlas a la calle además de miles de colillas...
No acaba ahí. En el baño, una papelera repleta y desbordando, el lavabo con manchas que la usuaria describe así: "sospechosas, no sé ni de qué son". La lavadora con algo marrón pegado, insectos, deposiciones de paloma...
Ángela ya no vive allí, pero ha pasado por un calvario en el que en múltiples ocasiones llamó la atención a su compañero de piso, sin que éste modificara para nada su conducta.
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