El momento de pedir la mano es uno de los más emotivos y bonitos en la relación de una pareja. Suelen estar planeadas en un lugar especial o significativo para ambas personas. Aunque a veces, no salen como se esperan.

Una pareja de Brisbane (Australia) ha protagonizado una pedida de mano algo peculiar. Luke, el novio, citó a Stephanie en un muelle a la luz del día para este momento tan especial. 

Además, quiso hacer partícipe a la hija que tienen en común, por lo que esta le ayudó a abrir el estuche del anillo. Con los nervios de la situación y la mala suerte que al destapar la caja, la alianza se resbaló y se cayó directamente al mar por una de las rendijas del suelo de madera.

Acto seguido, el joven se lanzó al agua con esperanzas de encontrar la sortija y la mujer miraba por los huecos de los tablones con desesperación y tristeza, pero con algo de esperanza por si lo llegaba a ver.

El vídeo lo ha publicado la novia en TikTok y cuenta ya con más de 30 millones de reproducciones. Muchos de los usuarios de la aplicación ponen en común que es un momento en el que los hijos deben quedarse a un lado.

"Amo a los niños. Pero a veces pienso que arruinan ciertos momentos", "Era obvio que eso iba a pasar", "Para los niños hay momentos, pero eso es entre pareja", son algunos de los comentarios al respecto.

Otros coinciden en que el lugar no era el más apropiado para hacer una pedida de mano: "Paso uno para pedir matrimonio: elige un lugar seguro para el anillo", "Dios te está enviando una señal no te cases", "Es que ya con que haya tablones me pone nerviosa".

Eso sí, tras la tormenta, llegó la calma. Y, con paciencia y para sorpresa de todos, acabaron encontrando el anillo. En el vídeo donde lo muestran, también quieren dejar claro que no fue culpa de su hija y que en ningún momento la han culpado de lo sucedido.