Río de Janeiro es famosa por ser una ciudad con una orografía muy extrema, algo que convierte al laberinto de calles que conforman la ciudad carioca en una ramificación de cuestas que terminan por dar a sus famosas playas. Este hecho junto a un despiste en un automóvil puede convertirse en un serio problema con ruedas y cuesta abajo.

En este vídeo podemos ver a uno de esos héroes diarios con una capacidad de reacción asombrosa que no duda en salvar el día con tal de que otras personas no sufran un accidente. Un salto increíble que ha evitado graves daños a personas e inmuebles.

Un coche descontrolado y seguramente sin el freno de mano puesto desciende por una calle cuando nuestro protagonista, sin dudarlo dos veces, consigue alcanzarlo y saltar al interior del vehículo para poder frenarlo y que no acabe estampándose contra las casas a las que dirigía.

Ya no solo el acto de pensar en los demás es de agradecer, porque parándose a pensar, nuestro héroe saltador se jugaba también su propio tipo si no conseguía detener el coche.