Se sorprende al encontrar un vídeo de su esposa casándose con otro hombre y descubre que ha sido estafado

A los 35 años, Yin Cheng ya es considerado un "joven anciano" en Bayannur (Mongolia), su ciudad natal, por lo que no sorprende que su familia lo haya estado presionando para que contraiga matrimonio cuanto antes. Una misión que no resulta nada sencilla en China, por lo que el hombre confió su tarea a Li, un casamentero que le presentó a Nana, una mujer que, según los datos que tenían, ya había estado casada antes.

El hecho de que Nana ya hubiera contraído matrimonio anteriormente no supuso ningún problema para Cheng que, después de mantener varias conversaciones por videollamada, le pidió a la mujer que fuera a Bayannur para conocerse en persona. Cheng envió 1.000 yuanes (128 euros) como señal de buena fe, aunque en ese momento no era consciente de la estafa en la que estaba cayendo.

Cuando la familia de Cheng conoció a Nana, el padre del hombre manifestó su deseo de conocer al que podría ser su consuegro, pero el casamentero intervino rápidamente y explicó que en el pueblo de la mujer se estaba construyendo un viaducto, por lo que la familia de ella estaba demasiado ocupada. Además, Li agregó que la empresa constructora estaba dando algunas subvenciones a las familias según el número de hijos que tuvieran a su cargo, por lo que Nana saldría perdiendo si se casaba antes de la firma de dicha compensación.

La familia de Cheng acordó entonces celebrar solo la ceremonia de boda tradicional y hacer oficial el compromiso solo cuando se completase la firma de la compensación. Así, Cheng y Nana se casaron en el mes de enero y la mujer recibió una dote de 148.000 yuanes (18.900 euros), joyas y otros regalos de boda.

Tres días después de casarse, Nana le dijo a Cheng que debía regresar con su familia y volvió después de una semana, pero dos días después agregó que debía ir a ayudar a su madre. La situación continuó así durante un tiempo, pero Cheng no sospechaba nada, pues pensó que su esposa extrañaba su hogar y estaba muy unida a su familia. 

Aun así, el novio comenzó a ver que algo no iba bien cuando su esposa dejó de atender sus llamadas, a lo que se sumó que pasaba mucho tiempo fuera de casa. En el mes de marzo, Cheng estaba utilizando su teléfono para ver algunos vídeos cuando se topó con un breve clip de una boda en la ciudad de Xixiaozhao en el que la novia era muy parecida a su esposa. Volvió a ver el vídeo y se convenció de que era ella.

Como Nana seguía sin responder a sus llamadas, Cheng decidió viajar a Xixiaozhao para descubrir la verdad. Después de localizar al supuesto nuevo marido de su esposa, Cheng confirmó que la mujer del vídeo era Nana, por lo que llamó a la policía para resolver la situación.

Tras investigar el caso, las autoridades descubrieron que Nana y Li eran parte de una gran red de estafadores que se aprovechaba de hombres desesperados por encontrar esposas. Se especializaron en convencer a sus víctimas de que solo realizaran la tradicional ceremonia de matrimonio y pagaran la dote, mientras posponían la firma de los trámites. La policía arrestó a cinco personas que habían estado involucradas en la trama con la que habían conseguido estafar a 19 personas causando daños que se cifraban en dos millones de yuanes (256.000 euros).