Un radar de control de velocidad defectuoso que se encontraba en la provincia de Ancona, en Italia, alcanzó una cifra record al registrar una velocidad de más de 700 km/h a un sedán de clase económica Ford Focus que conducía una mujer.

La policía de tránsito, procedió a ponerle una multa 850 euros, además de una penalización de 10 puntos a su carnet de conducir. La perjudicada, sorprendida, se niega a pagar la multa.

Aunque puede que la conductora hubiese excedido el límite de velocidad de 70 km/h, la policía pasó por alto el hecho de que resulta imposible que su vehículo pudiese alcanzar una velocidad 10 veces mayor de la permitida, la misma que consigue un avión a punto de despegar y dos veces más rápido que un coche de Fórmula 1.

Al parecer, el error es debido al mal funcionamiento de la cámara de velocidad, pero parte de la responsabilidad también recae en la policía local, que no verificó los datos en el informe antes de enviárselos a la mujer.

Para solucionar el problema, Giovanni Strogolo, representante del comité de vialidad local, aconsejó la mujer que no aceptara la cancelación de la sanción, sino que exigiese una indemnización a las autoridades.

No es la primera vez que a un conductor le llega una multa por una velocidad desorbitada. En el 2018, a un hombre belga le llegó una multa por conducir su Opel Astra a 696 km/h. Una vez corregido el margen de error, la cifra oficial se redujo... a 654,24 km/h.