La primera mitad del Real Madrid-Ajax de Ámsterdam se puede resumir en una palabra para el conjunto blanco: dantesca. Los de Santiago Solari se fueron al descanso con un 0-2 en contra, eliminados de la Champions League y dos de sus futbolistas de ataque lesionados. Lucas Vázquez y Vinícius cayeron antes de llegar a la media hora de encuentro, lo que obligó al técnico a gastar dos cambios que podrían haber sido vitales para la recta final de encuentro.

El primero en caer fue el gallego, aunque fueron seguidas. Vázquez notó un pinchazo en la parte posterior del muslo e inmediatamente se echó al suelo. Solari reaccionó y sacó a Bale, casi sin calentar, al campo, mientras la afición del Real Madrid le pitaba de nuevo.

Estaba el Madrid aún recomponiéndose cuando Vinícius se echó al suelo. Después de recibir un golpe en una acción anterior, ya se había quedado algo dolorido, pero después de un contragolpe que estrelló contra la red, acabó tirándose entre lágrimas, consciente de que era algo grave. El médico del Real Madrid fue corriendo a atender al joven brasileño, que se fue sollozando y notablemente afectado.

En función de la dolencia que tenga en ese tobillo puede no sólo ser su final en el Real Madrid para este y los siguientes partidos, sino también en su convocatoria con Brasil.