Sin prisa pero sin pausa, Luis Enrique sigue planificando su futuro. Tras su salida del FC Barcelona hace ya casi un año, el entrenador asturiano dejó claro que iba a pasar un tiempo sin entrenar, disfrutando de la familia y el tiempo libre. En todo este tiempo ha recibido ofertas y en fechas recientes dos de los dos clubes punteros de la Premier League se han interesado por su situación: Arsenal y Chelsea.

La opción del Arsenal ha quedado descartada tras varias conversaciones. El club londinense conocía sus pretensiones económicas, pero el obstáculo no ha sido ese sino el proyecto deportivo. El Arsenal no puede asumir el gasto que implicaba la dimensión de plantilla que pretendía Luis Enrique y maneja ya otros nombres para sustituir a Arsene Wenger, que deja el banquillo ‘gunner’ tras 22 temporadas. El entrenador preferido ahora por los propietarios es el italiano Massimiliano Allegri, de la Juventus.

El interés del Chelsea sí sigue en pie, aunque al ralentí a la espera de concretar la salida de Antonio Conte. Al contrario que el Arsenal, el Chelsea no pone límites a Luis Enrique a la hora de confeccionar la plantilla, pero sí pretende rebajar su sueldo. La directora general del Chelsea, Marina Granovskaia, negocia el despido de Conte, cuyo finiquito podría superar los 10 millones de euros. Si se resuelve el contrato del italiano, Luis Enrique es el deseado.

Mientras tanto, 'Lucho' espera acontecimientos sin prisa. En los últimos meses ha viajado a destinos como Filipinas o Maldivas, y ha participado en distintas pruebas ciclistas, una de sus pasiones.

Que no tenga prisa por entrenar no significa que no quiera hacerlo. Le preocupa poco eso de “perder el tren”, que suele decirse de los técnicos que pasan demasiado tiempo lejos de un banquillo. Y tampoco el dinero es una prioridad. De hecho, ha rechazado una oferta de la Superliga China que le habría reportado un sueldo anual de 20 millones de euros netos.