Se acabó. Andrés Iniesta abandona la élite del fútbol mundial y no vestirá la camiseta del Barça la próxima temporada. Emprende una aventura lejos de España en busca de la tranquilidad para el ocaso de su carrera. Es el fin de una era a la que la descripción 'exitosa' se le queda demasiado corta. El motor y el corazón del FC Barcelona lo ha ganado absolutamente todo.

Suele decirse que su forma de ser le ha privado de los galardones individuales, pero no es del todo cierto. En 2012 ganó el premio de la UEFA al mejor jugador en Europa, instaurado el año anterior, y que hasta el momento sólo han ganado él, Cristiano Ronaldo (tres veces), Leo Messi (dos) y Franck Ribéry.

Sin embargo, en todos sus años en la élite del fútbol mundial, no ha sido premiado con el Balón de Oro. Algo que se reclamó desde España cuando, en 2010, Iniesta hizo feliz a todo un país, además de haberlo ganado ya todo con el Barça. Tanto es el clamor que la propia revista creadora del prestigioso galardón, France Football, ha pedido perdón al jugador por no agraciarle con tamaño reconocimiento.

Pero si a algún jugador se le imagina disfrutando más de las alegrías colectivas que de los triunfos exclusivamente propios, es a Andrés Iniesta. Una súper estrella muy lejos, en imagen y actitud, de lo que en el fútbol se entiende por súper estrella. Y ahí está, con un tomo de la Historia del fútbol español personal e intransferible, escrito con sus botas.

Andrés Iniesta ha pasado 21 años en el Barça, catorce de ellos en el primer equipo. En estos casi tres lustros en la élite del fútbol mundial lo ha conseguido todo:

8 Ligas (que, todo apunta a que este domingo serán 9)

4 Champions League

6 Copas del Rey

7 Supercopas de España

3 Supercopas de Europa

3 Mundial de Clubes

Además de las dos Eurocopas y el Mundial que logró con la Selección española, con ese gol eterno ante Holanda en la final de 2010. Aún le queda a Iniesta, además de la consecución de su novena Liga el próximo domingo, la oportunidad de decir adiós a la élite del fútbol mundial coronándose de nuevo con España.